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La UArtes y el manejo de la enseñanza virtual

Docentes de la Universidad de las Artes comparten la experiencia de impartir clases online. El Departamento de Lenguas Extranjeras (DLE), por ejemplo, le dio continuidad al curso intensivo de invierno.

Acorde a la normativa transitoria para el desarrollo de actividades académicas en las Instituciones de Educación Superior, debido al estado de excepción decretado por la emergencia sanitaria por la pandemia COVID-19, la Universidad de las Artes puso en ejecución la enseñanza en modalidad virtual. Docentes y estudiantes consultados a través de las redes sociales y el correo electrónico destacan el esfuerzo que ha hecho la UArtes por acompañarlos, por estar atenta a sus necesidades y a las de la comunidad universitaria toda y por brindar herramientas tecnológicas efectivas y actualizadas, desde la plataforma Moodle (Campus Virtual UArtes) hasta la creación y manejo de videoconferencias (Zoom).

La docente Monserratt Mogrovejo, jefa del Departamento de Lenguas Extranjeras (DLE), comparte la experiencia de la enseñanza virtual para continuar así con el curso intensivo de invierno. Indica que tras ser aislados por la emergencia sanitaria se propuso junto a su equipo de trabajo estar siempre disponibles para los estudiantes, con el fin de no perder el manejo del curso ni dejar de acompañarlos efectivamente en su aprendizaje.

Con la plataforma SGA implementada por la UArtes, los docentes han podido mantener constancia de las actividades y asistencias. Y con Moodle, darle forma a sus clases en línea, ya que esta herramienta permite compartir archivos, desarrollar ejercicios, evaluar a los estudiantes y asignar tareas.

Hicieron, asimismo, uso del WhatsApp para comunicarse rápidamente con todos los estudiantes de la clase sobre cambios o cualquier duda que surgiera acerca del material provisto en las plataformas antes mencionadas.

Otros miembros de la planta docente del Departamento de Lenguas Extranjeras explican que con la herramienta virtual Moodle lograron compartir más ordenadamente recursos que los alumnos deben revisar a diario, con Edmodo, Google Classroom y otras aplicaciones educativas. “Mi único problema con Moodle es la poca confianza a la hora de programar algo, pues esta plataforma tiene formatos un poco confusos para calificar y para retroalimentar el trabajo de los estudiantes. Por lo tanto, he llevado un registro más efectivo de los trabajos y calificaciones vía SGA / Microsoft Email”, manifiesta Fernando Intriago Cañizares.

La plataforma Zoom resultó para los docentes del DLE una revelación en lo que a recursos tecnológicos se refiere. Fernando Intriago Cañizares confiesa, no obstante, tener aún dudas sobre cómo usarlo para clases de hasta 25 personas, puesto que se evidencian problemas de audio y visualización con tan solo cinco personas presentes. “La herramienta de videoconferencias ha sido excelente para retroalimentar trabajos escritos, practicar la fluidez y tener tutorías de clarificación sobre material provisto. Los estudiantes han podido entrar y disfrutar de las reuniones como una especie de drive through experimental, donde el profesor se encuentra disponible para aclarar dudas y compartir información a través de múltiples pantallas”, agrega el docente. Monserratt Mogrovejo admite, por su parte, que siendo conocedora de Moodle, de la mayoría de sus herramientas, así como de Zoom, le tomó muchas horas programar clases a su gusto.

La docente Vanessa Echeverría comenta que para continuar las clases de Inglés 2 en línea usa Zoom instalado como plugin desde el campus virtual Moodle, a fin de realizar videoconferencias diarias en la mañana de alrededor de 2 a 3 horas dependiendo del tema. “Empleo también el plugin de contenido interactivo H5P desde Moodle para poner ejercicios de comprensión oral, comprensión escrita, refuerzo de gramática, vocabulario y pronunciación. Asimismo, aplico la herramienta del campus virtual, foro, para producción escrita y oral. Utilizo también el recurso página de Moodle para crear contenido de apoyo de cada unidad con videos, imágenes y links”.

Para programar evaluaciones, agrega Vanessa Echeverría, utiliza la actividad cuestionario de Moodle. “Para las tutorías hago videoconferencias desde Zoom en Moodle y los deberes son algunos programados en H5P o cuestionario y otros de producción con la actividad tarea o foro de la plataforma virtual”.

Revela haber realizado trabajo grupal en videoconferencia con la opción grupos de Zoom y escribiendo en foro la evidencia. “Hemos jugado kahoot para punto extra sobre aportes en vivo en videoconferencia. También explico los puntos gramaticales con el PDF del libro guía haciendo anotaciones desde Zoom y la herramienta Pizarra de Zoom usando mi lápiz óptico. Finalmente, para mantener la comunicación sobre tareas, revisión y recordatorios uso los mensajes de Moodle y SGA que generan copias automáticas a su email institucional. Y la asistencia se toma en vivo en videoconferencia registrando en SGA”.

La docente Aurora Zanabria, coordinadora de la Maestría en Fotografía y Sociedad en América Latina, comparte la experiencia de haber participado en los cursos de francés y destaca como positivo el buen manejo de la clase y que se promovieran la interacción y el trabajo colaborativo con otros estudiantes, así como la implementación de recursos de respaldo en el Moodle. ¿Lo negativo? “La duración de las sesiones, pues es difícil mantener la concentración por tanto tiempo en entornos virtuales, y los fallos en la conexión que cada uno de los participantes puedan tener”.

De la experiencia con las clases online, Vanessa Echeverría abona en que los estudiantes manifiestan problemas de internet, como conexión, audio e imagen. “Mencionan que la casa no es igual que el aula de clases o, en nuestro caso, el laboratorio, ya que existen varios distractores. Algunos no cuentan con una computadora y hacen sus tareas desde el celular”.
Para los docentes del DLE, el curso intensivo fue beneficioso para entender los retos del próximo semestre. Es necesario elaborar protocolos de ética en la clase virtual, entender que los horarios de clase ya no pueden ser tan rígidos y que los estudiantes necesitan flexibilizar cuándo pueden realizar y entregar tareas. Lo más importante es seguir probando y adaptando lo que sirve, sin dejar de ser conscientes en qué cambios de estructura académica entre estudiantes y profesores son requeridos, porque un estudiante con seis o siete materias por semestre no logrará tener una buena educación si no innovamos el sistema educativo desde casa.

A continuación herramientas online que puedes utilizar:

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