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Al Mando y la representación del poder

Al Mando indaga en el vasto material fotográfico del archivo histórico de diario El Telégrafo, haciendo foco en el registro de imágenes sobre el poder. El 14 de octubre se hizo la presentación del proyecto Al Mando: La representación del poder y el lanzamiento de su plataforma almando.art. En el evento hubo una intervención fotográfica a cargo de Amaury Martínez, arquitecto y fotógrafo, junto al realizador audiovisual Pedro Intriago. Además, se proyectó El Poder En Mi Constitución, pieza de videodanza dirigida e interpretada por Carolina Pepper, comunicadora, bailarina, coreógrafa y docente de la Universidad de las Artes. 

Ambas obras son las primeras derivas artísticas del Proyecto de Investigación “La representación del poder, derivas teóricas, escénicas y visuales”, bajo la dirección de Agustín Garcells y Natalia Tamayo.  Al Mando indaga en el vasto material fotográfico del archivo histórico del diario El Telégrafo, haciendo foco en el registro de imágenes sobre el poder político del país en diferentes momentos y personajes siguiendo tres ejes de comparación: El poder dictatorial: la representación del poder en dictaduras; el poder defenestrado: la representación del poder en crisis; y, el poder mediático: la representación del poder.

Al respecto, Carolina Pepper señala que este es un proyecto de investigación sobre las representaciones del poder, con tres derivas. “Trabajar por un lado con las fotografías de archivo de diario El Telégrafo que ahora reposa en la biblioteca de la UArtes y con esos insumos realizar una especial organización que se veía representada por tres ejes. De ahí surge un pequeño video danza que tiene una duración de cinco minutos con sus símbolos, para poderlos graficar, danzar, en ese tiempo. Cada uno de los investigadores que formamos parte de este equipo escribimos un texto desde distintas miradas”.

Dice, además, que al organizar toda esta información, porque se entiende que el archivo de prensa de diario El Telégrafo de tantos años es inmenso, se pretendió hacer una selección no cronológica sino a partir de tres ejes muy específicos y cada eje subdividido también porque la investigación se da en torno a tres personajes.

Amaury Martínez, fotógrafo y arquitecto, integrante del proyecto Al Mando, señala que el acercamiento que tuvieron con el archivo de diario El Telégafo, del que la Universidad de las Artes es su custodia y está guardado en la Biblioteca de las Artes, indaga las condiciones físicas, la distribución, cómo estaba catalogado todo este material fotográfico, y se “encontraron con copias en blanco y negro, copias a color y negativos para copia de color. Abordamos seis periodos. La primera: poder dictatorial y buscamos las fotografías del periodo de Ramón Castro Jijón, Guillermo Rodríguez Lara y César (Alfredo) Poveda. Y luego buscamos las del poder defenestrado, que son los presidentes que salieron, como Abdalá Bucaram, Jamil Mahuad y Lucio Gutiérrez. Buscamos entre muchísimas fotos, copias y negativos, aproximadamente 1.500 y de estas hicimos una preselección y nos quedamos con 400 fotos, periodísticas”.

Para Pepper, la página web se convierte en el soporte de toda esta información y por lo pronto tendrán las fotografías intervenidas y el video danza que es una propuesta artística también. “Lo que está pendiente es la tercera deriva, la deriva teórica, que estaría para noviembre, y en diciembre esperamos que el libro ya esté editado.  Decíamos que el libro tiene que salir con papel navideño incluido”.         

Amaury señala que a partir de la investigación histórica textual y gráfica recolectada en el periódico, se construyó un imaginario común fundamentado en textos analíticos que exploran las diversas representaciones del poder y la participación de la prensa en la construcción de los relatos políticos de la historia del Ecuador.

De esta forma, Al Mando se presenta como un dispositivo que atestigua, almacena y resignifica la memoria, invitando a reflexionar en el campo de lo político y los medios de comunicación, desde las artes visuales, la danza y el movimiento. ¿Qué buscamos?, pregunta Amaury retóricamente y responde que “observamos la fotografía, el espacio fotográfico, el fotograma, buscamos los personajes, los exmandatarios, los acompañantes extraños, los casuales, sus gestos, sus posturas, sus miradas, pero hay algo que nos llamó la atención: el reverso de la fotografía contenía mucha información increíble, que está reservada para unos cuantos del diario, diseñadores, diagramadores, editores y la dirección”. 

Las fotografías que tuvieron en sus manos y revisaron, señala, tenían en su reverso pies de foto, información básica, códigos, sellos, perforaciones, tachones, la medida real en algunas ocasiones, pliegues, dibujos, líneas, pero hay algo que es importante: los sellos que tenían estas fotos eran sellos que mencionaban el nombre del fotógrafo: Elio Armas, especial para El Telégrafo, o Foto Jordán, o Escobar Jr.  Y cuando trabajaron con negativos, la información de los negativos estaba de forma somera en los sobres, donde había un pie de foto con fechas, lugares, personajes, y mencionaban los nombres del fotógrafo: como Omar Torres, Carlos Granja. “Uno de ellos tenía un acercamiento importante con las dictaduras, con dos: Rodríguez Lara y Alfredo Poveda. Se trata del fotógrafo Elio Armas”.  “Hay fotos de Rodríguez Lara en Galápagos, en traje de baño con gente cercana, muy cerca del mar, donde él aparece con su familia e hijos en su casa, una foto íntima. Y creemos que este fotógrafo tuvo una mira diferente y claro tenía una cercanía con ellos”, indica Amaury. 

Pedro Intriago, otro de los integrantes de Al Mando, manifiesta que en la parte de creación lo que se hizo fue, después de observar 1.500 fotografías, a lo largo de seis meses, una precuraduría y se basaron más en el ámbito estético, tomando en cuenta el contexto histórico y valorando el anverso fotográfico. “Hicimos una intervención fotográfica, gracias a la asesoría de Daniel Alvarado, y a partir de allí empezamos una discusión. Estas ideas tanto de Freud como de Lacan sirvieron. Freud observa que el olvido es el reverso de la memoria, entonces pensamos en el reverso fotográfico, que es precisamente lo que está oculto. Todo aquello que no se ve, diría Freud, es el olvido, y quisimos poner en escena estas dinámicas, estos hilos con los que se construyeron esas imágenes, porque son en realidad una construcción de la realidad y esa construcción se da desde el corte editorial y la mirada del fotógrafo”.

Almando.art es la plataforma de información y reflexión generada por el proyecto de investigación “La representación del poder, derivas teóricas, escénicas y visuales”, financiada por la Universidad de las Artes para el bienio 2019-2020.

Fuente: Diario El Telégrafo

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