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Experiencias estudiantiles del Semestre B 2020

Acorde a su calendario académico, la Universidad de las Artes concluyó el sábado 20 de febrero de 2021 las clases de las carreras de pregrado y Nivelación del Semestre B 2020, las cuales se retomarán –ya como Semestre A del 2021– el 3 de mayo próximo.

De cómo resultó el segundo semestre 2020, de su virtualidad, de sus procesos, de los conocimientos asimilados y de las actividades académicas desarrolladas, cuatro de las alumnas de la Escuela de Literatura de la UArtes comparten sus experiencias estudiantiles; ellas son colaboradoras asiduas de la labor reporteril para el InfoUArtes, sea como pasantías o prácticas preprofesionales de iniciativa propia.

Fiorella Prado, del octavo semestre de Literatura, sitúa al Semestre B 2020 como “un período de enfoque y desarrollo, tomando en cuenta las adversidades del semestre anterior. Pasamos de estar en una prueba de clases virtuales hacia la aceptación y planteamiento real de esta nueva modalidad. Me parece que todos como estudiantes decidimos aprovechar en este semestre lo que no se pudo del anterior, ya que el tema de la pandemia cada vez disminuye su impacto, aunque no por ello deja de afectarnos”.

Agrega que el Semestre B 2020 estuvo lleno de cambios. “Se llegó a grandes logros como la autonomía universitaria y muchos proyectos por parte de los estudiantes han surgido o se han implementado iniciativas como consecuencia de la virtualidad. Ha habido algunos problemas de comunicación y atención provocados por la distancia que supone recibir clases de manera virtual, pero se han planteado alternativas y acuerdos entre los estudiantes y los profesores, que permitieron llevar de mejor manera el semestre”.

Para el primer semestre del 2021, Fiorella espera que algunas actividades ocurran de manera presencial, “lo cual es emocionante para toda la comunidad universitaria que ha estado distanciada durante dos semestres y requiere de tener acercamientos”.

Kendra Lindao, del sexto semestre de Literatura, indica que los segundos seis meses de estudio del 2020 bajo la modalidad virtual resultaron una montaña rusa de emociones. “Por una parte sentí el desgaste de estar frente a una pantalla con más intensidad y era algo que también noté en los maestros, que al inicio del Semestre B seguían con pagos de sueldos atrasados, por lo que muchas veces daban sus clases con datos móviles o se ausentaban por no tener internet, aumentando el trabajo autónomo del estudiante”.

Durante estos últimos meses, Kendra indica haber descubierto otra dificultad de la virtualidad: la desconexión entre el estudiante y maestro, así como entre el estudiante y la clase. “La presencialidad nos otorgaba la oportunidad de conocer al maestro, algo que aún no se puede lograr a través de la pantalla. Las clases autónomas se sienten vacías sin la voz del maestro, lo que hace que el estudiante se desconecte de la clase. Espero que para este Semestre A 2021 se puedan resolver estos problemas de desconexión, mejorando la metodología de trabajo”.

Angie Cobos, también del sexto semestre de Literatura, confiesa que aún no logra acostumbrarse a la virtualidad, por lo que ver un segundo semestre en esta modalidad le resultó agotador. “Tener que estar todo el día frente al computador haciendo deberes, rogar por no tener problemas de conexión cuando me tocaba exponer y esperar mucho para que carguen mis clases grabadas, fue mi día a día. En algún momento sentí que ya no podía más, sumándole a la situación de la pandemia que parece no mejorar. Lo cual hace lejana nuestra vuelta a las aulas, que es lo que todos deseamos”.

De todas formas, añade Angie, “se debe seguir y lo he podido hacer gracias al apoyo de mis compañeros de carrera que han estado ahí para responder mis dudas y darme aliento para continuar, también a Carmen Cortez, quien es parte del área de Comunicación de la UArtes, me dirige en las pasantías en el InfoUArtes y me dijo las palabras justas en el momento que lo necesitaba, así como algunos profesores que son de mucha motivación, con los comentarios que hacen a nuestros trabajos, entienden todo el esfuerzo y lo aplauden”.

Alina Manotoa, quien acaba de concluir el quinto semestre de Literatura, destaca el contraste entre el Semestre A 2020 y el Semestre B 2020. Para el segundo semestre virtual “ya sabía a qué atenerme y ya había aprendido a sobrellevar este tipo de enseñanza, mientras que al primer semestre 2020 lo sentí como un piloto, de prueba y error, en el que tanto alumnos como docentes estábamos descubriendo cómo trabajar en estas nuevas condiciones. Aun así, lo más complicado sigue siendo la abundante demanda de tareas (la cual se siente incluso más pesada ahora que en clases presenciales), sumado a la importancia que se le está dando a las mismas, ya que pareciera que muchos alumnos están depositando sus esfuerzos solo en cumplir con las tareas, para así alcanzar el puntaje necesario y aprobar, y no en realmente estudiar y atender la materia, por lo que no siempre se logra un real aprendizaje”.

Para Alina una de las cosas más destacables dentro de la educación virtual ha sido el trabajo del Departamento de Lenguas Extranjeras. “En mi experiencia, las materias de idiomas han sido de las que mejor se han adaptado a la virtualidad, cambiando su metodología para ajustarse a este nuevo tipo de educación, logrando un resultado positivo, en el que aparte del cumplimiento de las tareas se motiva la participación del estudiante en las clases, generando un verdadero aprendizaje”. Para el siguiente semestre, la estudiante aspira a un mayor compromiso de docentes y alumnos, “pues he aprendido que el interés por el aprendizaje es lo que motiva a quienes están involucrados dentro del proceso educativo”.

Es de anotar que como cierre de las actividades académicas del Semestre B 2020, los alumnos UArtes propiciaron junto con sus docentes presentaciones artísticas finales, así como casas abiertas. Entre las recientes, el Concierto de Ensambles de la Escuela de Artes Sonoras, desarrollado el 18 de febrero pasado y transmitido en Facebook de la UArtes.

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