El Laboratorio de Creación de Cuentos con la Comunidad los hizo enseñar y aprender

“Narrativas en confinamiento” es el nombre que adoptó el Laboratorio de Creación de Cuentos con la Comunidad, cuyos integrantes participarán en el diálogo que, moderado por la docente Cecilia Velasco, se entablará este viernes 18 de diciembre de 2020, en la tercera jornada del VI edición del Encuentro de Editores Independientes Libre Libro. Será desde las 17:00 hasta las 18:30, cita en la que también tomarán parte los responsables del Club de Escritura Creativa y del Club de Lectura Infestación.

El Laboratorio de Creación de Cuentos con la Comunidad estuvo a cargo de Angie Cobos, Daniella Vera y Neysser Barberán. A continuación, la primera estudiante mencionada, quien cursa el sexto semestre de la Escuela de Literatura de la UArtes, da detalles en primera persona de esta actividad que nació en la materia Laboratorio con la Comunidad, dictada por Natalia Tamayo. También enriqueció esta información entrevistando a los compañeros con quienes cristalizó la propuesta, la cual está inscrita en el catálogo de proyectos “Susurros de un mundo en pausa” y en “Umbrales”. Aquí su voz:

Para la materia Laboratorio con la Comunidad se nos pidió que armáramos grupos de trabajo. Al ser de tronco común había variedad de carreras. Eso fue un buen punto, porque de esa forma se podían realizar proyectos interdisciplinarios, sin embargo, lo nuestro se enfocó solo en literatura por ser de esta escuela. Recuerdo que me llegaron mensajes de Daniella Vera para trabajar en conjunto con Neysser Barberán, inmediatamente acepté y fue una muy buena decisión. Los conozco porque he compartido clases con ellos y sé cómo trabajan, sin duda el proyecto que realizaríamos iba a quedar bien, aunque no imaginé lo cansado y a la vez significativo que sería su proceso.

Específicamente, “Narrativas en confinamiento” trata la emocionalidad causada por lo que ha significado vivir en medio de una pandemia. Por eso vemos al taller como un lugar seguro para hablar y escuchar. Compartimos el mismo rango de edad con los participantes, por lo cual, esperábamos un encuentro cercano entre ellos y nosotros, es así que empezamos por la eliminación de las etiquetas “alumno”, “profesor” y al preguntarles si nos sintieron de aquella forma, respondieron que no. Leonela Plaza, una de las participantes, me dijo: “Siento que me estoy reuniendo con amigos para hablar sobre temas importantes, pero también para reírnos.”

Nuestro taller se realizó los viernes del 17 de julio al 18 de agosto, una hora con quince minutos cada sesión, pero, detrás de ello, estábamos Daniella, Neysser y yo buscando espacios libres entre nuestro horario de clases y familiar para reunirnos y planificar las clases. El taller fue sobre el cuento y buscamos el contenido más preciso para que se alcance a abordar y que los participantes pudieran aprender sobre él, tomando en cuenta que era su primer acercamiento a la escritura.

Les dimos las herramientas y ellos las utilizaron a su manera. De esa forma obtuvimos sus primeros cuentos. Cuando nos llegaba un correo con uno, nos emocionábamos mucho y reuníamos lo más pronto posible. Al leerlo en conjunto nos dábamos cuenta del potencial de cada uno y llenábamos de orgullo. Les remitíamos sus cuentos con sugerencias, incluso con cuentos que nos recordaban a los de ellos. De ahí esperábamos sus siguientes entregas, lo cual fue mucho mejor por cómo nos hicieron sentir; ver cómo habían tomado nuestras recomendaciones y cómo enriquecía a sus trabajos. También tuvimos revisiones personalizadas del cuento de cada uno, ahí entendimos a profundidad qué era lo que querían comunicar y ayudamos a que puedan hacerlo de mejor manera, pero siempre siendo ellos los escritores.

Finalmente, creamos el blog para la publicación de todos los trabajos. Lo adecuamos con los colores de nuestro taller y buscamos obras para que acompañen de forma visual al cuento de cada uno. Felices con el resultado, lo publicamos en nuestras redes. Sin duda, participar en el Libre Libro será de mucha ayuda para que se lea el blog que contiene los cuentos de Alicia Prado, Andrés Freire, Favio Santillán, Leonela Plaza, Saúl Criollo y Valeria López.

Neysser Barberán, quien está en el Itinerario de Pedagogía, describe esta experiencia como desafiante: “Puse a prueba muchos ámbitos que son esenciales para mí dentro de lo que yo quisiera ser, docente”. Y respecto a la escritura de los participantes comenta: “Fue algo muy sorpresivo ver cómo personas que no eran cercanas a la literatura pudieron utilizar estas herramientas, no para hacer algo totalmente tradicional o arraigado a lo que dijimos, sino que las usaron como directrices”.

Como apreciación general de “Narrativas en confinamiento”, Daniella Vera dice: “Fue muy gratificante el haber enseñado y, al mismo tiempo, aprendido con este taller. Si bien estamos viviendo en un mismo momento, cada uno lo ha experimentado de manera distinta. Escuchamos las historias de nuestros participantes y ellos, las nuestras; leímos sus historias, las cuales se fueron modificando, moldeando, llevando a la ficción de la mano. Introducir al campo literario a personas ajenas a él y que allí descubran un lugar y herramientas para gritar, para desahogarse, para poner el sentimiento en palabras y que estas tomen espacios, narradores, personajes y ambientes significó mucho para nosotros y no pudimos estar más contentos con los resultados”.

Agradezco tener a Daniella y a Neysser como compañeros de carrera y en este caso, como talleristas y amigos, ellos y las cualidades que los acompañan hicieron de esta una experiencia inigualable. Una experiencia que queremos repetir. Somos conscientes de que en el futuro habrá cambios en nuestras vidas para enfrentar y creemos firmemente en la literatura como un medio para que las personas plasmen cómo se sienten respecto a ello. Estaremos gustosos de acompañar en ese proceso.

Blog de “Narrativas en confinamiento”: https://narrativasenconfinamiento.wordpress.com/

Facebook
Twitter
WhatsApp