Hoy, 24 de octubre, se celebra el Día Internacional de la Biblioteca, fecha establecida desde 1997 por iniciativa de la Asociación Española de Amigos del Libro Infantil y Juvenil con el objetivo de concienciar a la sociedad de la importancia de la lectura y como homenaje y reconocimiento a la labor de los bibliotecarios/as.
Entorno a la celebración mencionada y al trabajo que desde la Biblioteca de la Universidad de las Artes se viene desarrollando desde sus varios ámbitos con y para la comunidad UArtes y la colectividad en general, la magíster Soraya Campos, directora de Servicios Bibliotecarios, comparte algunas reflexiones e invitó hacer lo propio a los funcionarios que laboran en la unidad a su cargo, quienes expresan también lo que significa ser bibliotecario/a.
Soraya Campos, quien es magíster en Bibliotecología con mención en Gestión de la Información y parte de la Asociación Nacional de Bibliotecarios Eugenio Espejo (ANABE), considera que la Biblioteca de las Artes es un pilar de la sociedad, un elemento esencial en el tejido social, cultural, educativo y artístico; alineada a sus valores institucionales, asume un compromiso social con la comunidad, fomentando el desarrollo cultural y artístico de quienes la visitan.
La Biblioteca de las Artes está comprometida a ser un espacio inclusivo y accesible, fomentando la educación, la cultura y la socialización para todos los sectores de la comunidad. Su presencia es esencial para el desarrollo cultural, puesto que custodia una rica colección de recursos bibliográficos especializados en artes y literatura, facilitando: el acceso a fuentes primarias y secundarias para la comunidad UArtes (estudiantes, docentes y administrativos), investigadores y público en general; la exploración de la diversidad cultural y artística del país y gran parte del mundo; y la preservación y difusión del patrimonio cultural.

En la educación artística, mediación lectora e inclusión social, la Biblioteca de las Artes es un espacio dinámico que fomenta el aprendizaje, ofreciendo recursos y espacios para la formación integral de niños, jóvenes, adultos y adultos mayores; programas y talleres de educación artística y mediación lectora que celebran la diversidad y la inclusión.
Entre las iniciativas destacadas de la Biblioteca de las Artes constan: Convocatorias Alumni, una oportunidad anual para que los graduados de la Universidad de las Artes puedan presentar proyectos de mediación lectora y artísticos culturales; Lanford Abierta, que nació y se desarrolla en la semana que se celebra el Día del Libro; y tres propuestas de mediación lectora dirigida a niños, jóvenes y adultos “Cronotopias”, “Exploradores de cuentos” y “Baúl Literario”.
La Biblioteca de las Artes se caracteriza por brindar acceso gratuito a todos los talleres y programas, los cuales son espacios de encuentro y diálogo para personas de diversas procedencias y edades, fomentando la interacción y el intercambio social, así como el fomento artístico, puesto que exhibe y promueve las obras de artistas emergentes, contribuyendo al enriquecimiento del patrimonio cultural.
“Los funcionarios que laboramos en la Biblioteca de las Artes poseemos un compromiso constante, ya que nos debemos a la comunidad en la que estamos insertos. Es nuestro deber prestar servicios a distintos grupos que asisten a la biblioteca”, precisa Campos y destaca, además, el valor del trabajo colaborativo e interdisciplinario con diferentes profesionales de diversas áreas, lo cual les permite nutrirse de nuevos proyectos, ya sea para realizarlos o complementar sus actividades. Menciona, por ejemplo, al UAFestival Cole, que se trabaja junto al MZ14 Centro de Producción e Innovación de la UArtes, y a la labor desarrollada con diferentes instituciones públicas y privadas a fin de brindar a los jóvenes la oportunidad de tener un espacio para que sus talentos sean reconocidos.

Campos revela coincidir con el pensamiento de Magán Valls: “Repensar la biblioteca no es solo repensar sus servicios, su modelo y sus métodos de gestión, es repensar el compromiso ético que la sustenta y la guía… Humanizar la biblioteca es una labor que debemos priorizar, pues de nada sirven los avances tecnológicos si no tienen una contrapartida en la mejora del ser humano… No olvidar nuestra misión es el único modo de lograr nuestros objetivos. Por ello, conviene no confundir lo secundario con lo esencial y retomar el compromiso de servir al ciudadano”.
Vale anotar que, por la celebración del Día de la Biblioteca, en colaboración con ANABE y JSTOR el repositorio UArtes organizó la charla “El Rol de la Inteligencia Humana en la Adaptación del Profesional de la Información y la Innovación en Bibliotecas del Futuro”; intervino como expositor Jairo Díaz Arias.
Asimismo, en representación de la UArtes Campos participó junto a la UDLA en el diálogo “Promoción de Lectura en las Bibliotecas Universitarias”, organizado ayer, miércoles 23 de octubre, por la Sede Nacional de la Casa de las Culturas.
El sentir de los bibliotecarios UArtes
Junto con Soraya Campos, en la Biblioteca de la Universidad de las Artes prestan sus servicios Gissela Andrade Sánchez, Jacqueline Loor Perea, Yuliana Yagual Delgado, Zully Ordóñez Guerrero, Alexander Vera Avilés, Isaac Bajaña Mateo, Julio Ontaneda Briones, Cinthia Ponce Izquierdo, Deysi Mora Osorio y Harold Maridueña Alvarado. Varios de ellos reseñan su labor y lo que significa ser bibliotecarios y bibliotecarias.


Julio Ontaneda Briones (Guayaquil, 1986) se graduó en la Escuela de Bibliotecología y Archivología de la Universidad de Guayaquil y ejerce como Bibliotecario/Archivista en la UArtes desde 2014. Actualmente, como Analista de Colecciones en el área de Procesos técnicos, atención y asistencia especializada a clientes de la información, teniendo a su cargo las capacitaciones sobre recursos virtuales y la alfabetización informacional de los servicios que tiene y presta la biblioteca, así como de elevar información en el Repositorio Digital Institucional DSpace.
Alexander Vera labora desde hace nueve años en la Biblioteca de las Artes, nutriéndose de experiencias en la labor bibliotecaria y administrativa. “Inicié como asistente de biblioteca y ascendí a analista de adquisiciones. Mi enfoque principal ha sido la recepción de materiales bibliográficos a través de donaciones, canjes, compra y otras formas de recepción. Brindo también atención al público y realizo diversas tareas inherentes a la labor bibliotecaria”.
Yuliana Yagual Delgado lleva un año dos meses en la Biblioteca de las Artes, lo cual considera una maravillosa oportunidad para explorar nuevos mundos, aprender y crecer. “Me ofrece un espacio tranquilo y acogedor; la interacción con los usuarios permite que puedan disfrutar de una amplia variedad de libros, recursos y servicios. Tenemos propuestas interesantes para todas las edades, desde cuentacuentos para niños hasta clubes de lectura y talleres para adultos”, anota y agrega que su experiencia como bibliotecaria le ha permitido conectar con personas que aman los libros. “La lectura es una delicia para los sentidos y la mente, un recurso valioso que debe ser apreciado y aprovechado al máximo”.
Deysi Mora Osorio tiene una experiencia de seis años como asistente técnica de la Biblioteca de las Artes y pondera su crecimiento. Entre las actividades que desarrolla, como el ingreso de libros al sistema, la colocación de signatura topográfica y la organización del fondo bibliográfico, la funcionaria destaca también el contacto con los estudiantes, a quienes ayuda con sus dudas y a encontrar los recursos del catálogo. “La satisfacción expresada por ellos nos deja saber que estamos realizando bien nuestro trabajo”, dice. El entorno dinámico y creativo en el que se desenvuelve han sido claves en lo profesional y personal, agrega, reafirmado su pasión por el mundo bibliotecario.

Isaac Bajaña labora desde hace aproximadamente cinco años en la Biblioteca de las Artes. Los considera importantes para su crecimiento laboral y personal, pues ha llevado a la práctica su preparación académica como bibliotecario. “He conocido a muchas personas, ya que no solo brindamos atención a la comunidad UArtes, sino también a la colectividad. Tenemos un excelente ambiente laboral, trabajamos en equipo y eso se refleja en los resultados de nuestro desempeño”.
Gissela Andrade Sánchez es magíster en Bibliotecología con mención en Gestión de la Información, labora desde hace ocho años en la Biblioteca de las Artes, tiempo en el que considera ha crecido en lo profesional y personal. Los usuarios también han contribuido en ese aprendizaje, sostiene, pues inspiran y guían el trabajo que el bibliotecario desempeña. “Para mí, la biblioteca es mucho más que un lugar de trabajo; se ha convertido en mi primer hogar. Estoy profundamente agradecida por la oportunidad de contribuir al crecimiento y éxito de esta institución, y por formar parte de este equipo que sigue evolucionando y aportando al conocimiento y la cultura”.
Texto: colaboración de Mgr. Soraya Campos; contribuyeron con sus testimonios Julio Ontaneda, Yuliana Yagual, Deysi Mora, Gissela Andrade e Isaac Bajaña.
Fotos: Mgr. Tyrone Maridueña/Dircom y Archivo/Dircom.







