Una metodología que trabaja desde la infancia la llevó a “Pasar a limpio”. Melanie Rojas, hoy egresada de la carrera de Artes Visuales, da cuenta así de su muestra de titulación, la cual estuvo en la galería El Garaje del edificio Enrique Tábara. Para adaptarse al sistema académico mientras convive con dislexia, la artista dibuja sus pensamientos, los repite y pasa a limpio con una buena organización.
La obra de Melanie Rojas estuvo expuesta del 30 de julio al 22 de agosto pasados y en diálogo con InfoUArtes comparte, en primera persona, los abordajes de su trabajo final. Partiendo del método mencionado, ella anota que lo convirtió en su proceso creativo y lo contrapuso con las metodologías pedagógicas. En las piezas que presentó al público propuso una mirada crítica a los mecanismos de control del sistema educativo, vinculando experiencias personales con reflexiones artísticas y colocando al error, a la repetición y al sentido como parte de un motor creativo.
“Dibujar mis pensamientos, repetirlos y pasarlos a limpio es un proceso que me hizo hacerme preguntas y llegar a filósofos como (Friedrich) Nietzsche y defensores de la creatividad como Ken Robinson, entre otros. Trabajar con mi metodología ha sido, sin duda, un punto de partida: una introducción a mi proceso creativo, una forma de visibilizar los pasos que realizo para construir una obra”.



Agregó que el tema institucional estuvo estrechamente ligado al origen de su metodología, ya que nació desde una sensación de descontento con las normas tradicionales. “Siento que mi práctica superó esa etapa introductoria y me encuentro en una fase de desarrollo, donde comienzo a hacerme interrogantes sobre otros temas de interés como el fútbol, abordado desde su estética popular, cultura barrial, emocionalidad y ritualidad”.
Rojas indicó que, sin dudarlo, son etapas que le dieron la oportunidad de un aprendizaje profundo, tanto a nivel profesional como personal. Haber comenzado por cuestionar su relación con la institución le ha permitido construir una voz artística propia y expandirse desde ahí hacia otros temas que también la atraviesan.
“La transición de una metodología personal a una propuesta artística crítica reafirma que el arte no solo es resultado, sino también proceso, y que, en ese proceso, el desorden puede ser una forma legítima y poderosa de conocimiento.
Melanie Rojas mencionó también el acompañamiento que tuvo en el acto inaugural de “Pasar a limpio”: su familia, amigos, compañeros de la Universidad de las Artes, excompañeros de colegio y docentes. Entre los presentes, su tutora, Gabriela Fabre, y los también artistas y docentes Ruth Cruz, Cristian Villavicencio, José Andrade, Ilich Castillo, Lupe Álvarez, Julio Ruslán y Saidel Brito.

A continuación, el texto curatorial de “Pasar a limpio” de la docente Gabriela Fabre:
Gabriela Fabre, su texto curatorial
Desde hace algún tiempo he acompañado de cerca el proceso de concepción de la exposición Pasar a limpio, de Melanie Rojas, quien se ha interrogado sobre su experiencia dentro de los sistemas tradicionales de educación. A partir de sus dificultades, aciertos y tensiones con ese modelo, ha desarrollado lo que ella denomina una “metodología alterada”: una dinámica individual que le ha permitido construir, con el tiempo, su identidad y su creatividad desde otros modos de aprender.
En esta exposición, la artista nos presenta reflexiones materializadas que emergen de un archivo íntimo, construido desde los afectos, el deseo de aprender y el impulso de descubrirse desde la vulnerabilidad, en contraste con las lógicas normativas del aula.
Este texto no busca explicar ni debatir en profundidad las metodologías tradicionales de enseñanza-aprendizaje, sino más bien señalar algunas inquietudes que la artista ha dejado entrever en cada conversación y en la producción de cada obra.
En primer lugar, Melanie ha intentado establecer vínculos entre las metodologías pedagógicas institucionales y las metodologías artísticas personales, reconociendo que cada estudiante o artista inventa su propio método, muchas veces en contraposición al orden impuesto por la educación formal. En este sentido, reivindica el error y la experimentación como motores creativos, una idea que se expresa en piezas como la serie Carátulas del año lectivo 2025.

Otro gesto visible en la exposición es la inclusión de errores ortográficos, no como fallas sino como gestos artísticos. Estos “errores” son asumidos por la artista como actos de desobediencia cognitiva, en el sentido que plantea Suely Rolnik: no como simple oposición, sino como un gesto que desafía los regímenes hegemónicos de producción de sentido, abriendo paso a formas de conocimiento marcadas por la intuición, la asociación libre, el deseo y lo imprevisto.
Por último, quisiera proponer una idea que el público podrá seguir hilvanando: crear implica también desaprender. Desde ahí, esta exposición nos invita a imaginar un espacio educativo que funcione como un taller experimental, más cercano al estudio de un artista que al aula tradicional.
Otras exposiciones de la egresada
De sus propuestas creativas, Melanie Rojas da cuenta de las exposiciones colectivas en las que ha intervino. Entre ellas, “Fotografía analógica”, 2022; “El gato negro”, 2023; “Proyect RA”, 2023; “Visiones expandidas”, 2024; y “I like muisne and muisne like me”, 2025.
También tomó parte en la Bienal de Argentina-Buenos Aires, 2024, y en Salón de Arte 10 de Enero–Durán, 2025, en ambas participaciones su obra fue seleccionada.
Fotos: cortesía de Melanie Rojas, egresada de la carrera de Artes Visuales.







