Como mediación artística para infancias se denominó al espacio que la V edición de Inter[•]actos dedicó a los niños y niñas. A cargo de la carrera de Educación Artística Intercultural de la Escuela de Literatura, las actividades de esta franja –programada de 11:00 a 12:30– dieron inicio el martes 15 de julio, y se mantendrán hasta el viernes 18, el penúltimo día de los encuentros públicos de artes que organiza nuestra institución de educación superior.
En las jornadas del martes y de ayer se desarrolló un taller por día, dirigido cada uno por los talleristas/mediadores del proyecto Escuela de las Artes. El primero fue de Fanzine, a cargo de Teodoro Veloz y el segundo de Collage Sonoro, bajo la dirección de Álex Hincapié, su creador.
Vale anotar que con la mediación artística para infancias de Inter[•]actos se retomó también la propuesta Interactitos, un espacio que surgió en el 2019 por iniciativa de estudiantes de la Escuela de Literatura, ahora ya graduados, quienes programaron contenidos para niños, niñas y adolescentes.
La intervención de la Escuela de las Artes se dio en un trabajo conjunto con la carrera de Educación Artística Intercultural. El proyecto UArtes viene desarrollando desde el pasado mayo talleres –once en total– en cuatro instituciones: el Museo Nahim Isaías, el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC), el Museo Presley Norton y la Biblioteca de las Artes. Algunos talleres incluso han concluido y han dado paso a nuevas propuestas.

En ese marco, Teodoro Veloz anotó que para Inter[•]actos se implementó parte de los contenidos que se dieron en el taller de Fanzine, realizado en el Museo Nahim Isaías, llevándole esqueletos ya armados de los dobleces de los tipos de fanzine plegables y lo que trabajaron con los niños y niñas fue la escritura de textos con temáticas orientadas a lo que estaban viendo y viviendo en la Biblioteca de las Artes y en sus planteles.
“Entre ellos se compartieron recortes, pues se buscó la integración”, dijo Veloz. Mencionó que participaron estudiantes UArtes que realizan sus prácticas preprofesionales, quienes asumieron la tarea de supervisar a los niños y niñas para que se mantuviera la cordialidad y el sentido de comunidad al prestarse cosas y compartir, propiciándose entre ellos el diálogo, el intercambio e incluso la búsqueda de soluciones cuando alguno no tenía algo que el otro sí, entonces se producía el intercambio y experimentaron las habilidades sociales.
Una de las sesiones del taller de Fanzine fue el plegado y el collage de las piezas. Los participantes, niños y niñas de 7 a 11 años titularon de manera individual a su trabajo. Cada mesa tuvo un tema en particular y como tenían recortes variados debían asociarse, acercarse al otro de manera cortés para pedirle el material que requerían y compartir.


El segundo taller, “Collage Sonoro”, diseñado y dirigido por Álex Hincapié, tomó el espíritu de Inter[•]actos y se adaptó. “¿Qué hicimos?, explorar con niños y niñas el paisaje sonoro como una herramienta creativa. Les pedimos que identifiquen los sonidos para darnos cuenta de que estos tienen tal poder que cuando la gente escucha un audio, por ejemplo, no solo puede decir que escuchó un carro, sino también de qué color era. El audio tiene tal poder de entrar en la psiquis humana que se puede llegar a ver cosas con solo escuchar claramente un audio”.
Para el taller, agregó Hincapié, se jugó con ese concepto y se escucharon sonidos de la naturaleza. “Nos enfocamos en ella, en animales como las aves y con toda esa sensibilización los llevamos a la mesa y desde los audios que les pusimos compusieron un collage sonoro que consistió en un ave hecha con recortes de papeles de colores”.
Se creó una obra visual a partir de una obra sonora, explicó Hincapié, anotando que fueron aproximadamente los 30 niños y niñas que participaron en la actividad. A ellos se les entregó de manera individual imágenes de aves que el tallerista de la Escuela de las Artes descargó de un libro sobre estos animales vertebrados. Las gráficas contenían información acerca del ave, a fin de que las identificaran. De fondo se escuchaba un paisaje sonoro de aves para animar a los intervinientes a recortar la imagen del ave que había sido entregada y pegarla sobre una cartulina para adornarla de la forma que los niños y niñas quisieran, o también para que escribieran sobre ellas.
Texto: Carmen Cortez/Dircom.







