Nuestra vicerrectora académica, doctora María Paulina Soto Labbé, fue invitada por la Alcaldía de Medellín, Colombia, para dar inicio al Primer Encuentro Académico del Observatorio-Laboratorio de Políticas Culturales de esa ciudad, organizado entre el 30 de septiembre y 3 de octubre, en el marco de la IV Conferencia Internacional de Ciudades del Aprendizaje.
Los observatorios culturales se constituyen como los nuevos desafíos para la co-creación de conocimientos y aprendizajes desde las políticas culturales locales. Por ello, el encuentro contó con la participación de referentes y expertos locales, nacionales e internacionales, quienes trazaron líneas estratégicas que permitan avanzar en la implementación de dichas instancias.
La doctora María Paulina Soto intervino con la conferencia magistral “El cíclope de los símbolos y sus próximas batallas II”, en la que presentó un balance histórico y crítico en torno a las instancias de investigación que en las últimas dos décadas han realizado acompañamiento a la gestión de políticas culturales de nuestros países, aportando un conjunto de propuestas para la nueva etapa que se abre en el continente. Con esta introducción se dio inicio a un intercambio de experiencias de observatorios culturales colombianos e internacionales.

El balance partió señalando que, en nuestro continente, los centros de estudios nunca pudieron desprenderse de su matriz académica y que los observatorios solo han pretendido una autonomía de opinión que nunca llegó, esto a causa de su frágil dependencia financiera. Que experimentamos cambios que generan nuevos desafíos, tales como la necesidad de revisitar conceptos naturalizados que ya no nombran la realidad que observamos (territorio, identidades, nación, público, etc.); o que el gestor cultural actual, debe ser un agente de mediación y transformación en una sociedad con conflictos interculturales y violencias de origen simbólico (de género, religiosas, indígenas, etarias, discapacidades, etc.); y que se hace imprescindible conjugar ética y estéticamente las políticas culturales que acogen distintas cosmovisiones (agenda de convivencia, de educación inclusiva, de cuidado medioambiental, de diálogo inter-especies, etc.)
Finalmente, la doctora María
Paulina Soto señaló que en la última década han surgido observatorios públicos asociados
a los gobiernos locales y que habrá que evaluar sus agendas y prioridades
paraprioridades para verificar si esa “estabilidad”
facilita que cumplan su rol sin sacrificar la autonomía de opinión.







