Jefferson Onofre es el primer estudiante y graduado con discapacidad auditiva de la Universidad de las Artes. En la ceremonia donde el sábado 10 de diciembre de 2022 recibió junto con sus compañeros de cohorte el título de licenciado en Artes Visuales, él expresó en lengua de señas un emotivo mensaje a las autoridades y comunidad universitaria, y a los familiares de los graduados, congregados todos en el Pasaje Illingworth, campus centro de la UArtes, lugar del solemne acto.
Con la colaboración de Blanca Auria Estrella, quien en lengua de señas compartió las incidencias de las dos jornadas que tuvo en este año la graduación de los estudiantes UArtes, Jefferson Onofre manifestó su agradecimiento a la universidad, sus autoridades, docentes y compañeros por apoyarlo en su propósito de obtener la licenciatura. Admitió, no obstante, que quiso varias veces desistir y dejar la universidad porque no entendía lo que le decían, mas siempre recibió ánimo para continuar.
Su mamá, Cecilia Mora, fue su puntal y mencionó, asimismo, a algunos de sus familiares. También contó de cómo sus profesores llegaron, incluyendo el rector William Herrera, a aprender de la lengua de señas para no solo compartir conocimientos, sino para mantener comunicación y que se sintiera incluido.
Que siguiera adelante y que no claudicara era la consigna, y la lección constante: que jamás se sintiera limitado. En cada gesto y en cada seña, Jefferson Onofre dejó aflorar la emoción de graduarse, de haber logrado junto con la universidad y sus autoridades que se reconociera en el Consejo de Educación Superior (CES) a la lengua de señas como su lenguaje universal, y al castellano como su segunda lengua, para llegar así a la Unidad de Titulación, trabajar y presentar su trabajo final de tesis.
Justamente, vale recordar que su muestra de titulación, “Armar el rompecabezas del yo”, estuvo del 30 de agosto al 2 de septiembre pasados en la Casa de la Cultura Núcleo del Guayas. Allí, en una visita guiada a la que acudió una delegación de nuestra institución, fue la progenitora de Jefferson Onofre quien comentó que el ITAE le abrió las puertas y en Nivelación quedaron demostradas sus actitudes y capacidades para comenzar una carrera. “Hubo tropiezos con profesores que no entendían su condición, pero cuando se dio la homologación con la UArtes él se encontró así mismo, comenzó a tener amigos y a sentirse incluido en los grupos de trabajo. Los profesores buscaron muchas maneras para que se sintiera partícipe”.
En el relato de su experiencia como estudiante UArtes, Onofre contó que poco a poco fue aprendiendo y entendió que no podía perder su tiempo en la universidad, que debía esforzarse. Sus compañeros conversaban con él, bromeaban y también estudiaban mucho. Que le gustaba la universidad dijo en lengua de señas y entre lágrimas, y concluyó indicando: “a todos quiero mucho, gracias por ayudarme”.