La muestra fotográfica “Heridas que buscan sanar” y la visita al Museo de Conchas Gustavo Noboa Bejarano constaron en las actividades que se desarrollaron en el marco de la I Jornada Interuniversitaria de Divulgación de Proyectos de Investigación y Vinculación con la Sociedad, una iniciativa que reunió a la Universidad de las Artes (UArtes), la Universidad Casa Grande (UCG) y la Universidad del Río (UDR).
La primera actividad mencionada tuvo lugar en Casa Grande, donde se suscitaron también las primeras ponencias de la jornada, la mañana del 6 de noviembre; y la segunda, por la tarde del mismo día, en la Universidad del Río.
Organizada por estudiantes de la Facultad de Artes de la UCG, la exposición de fotografías «Heridas que buscan sanar» fue concebida como una poderosa expresión de memoria, sensibilidad y resistencia a través del arte. Es el resultado de la sistematización del proyecto Iniciativas Artísticas para la Paz, en el marco del programa Construimos Paz implementado por ONU Mujeres Ecuador, Municipio de Guayaquil y Casa Grande.


A manera de introducción, en «Heridas que buscan sanar” un texto explicaba que la propuesta recogía historias contadas por sus propios protagonistas, según se señaló en el texto de apertura: “Nacen si se quiere de una herida, de cuerpos vulnerables, cuerpos agredidos, cuerpos presos de miedo, cuerpos acorralados por las penurias la discriminación, la indiferencia institucional; cuerpos mercados por el estigma de crecer en los bordes, en las fronteras, en la periferia de la gran ciudad. Estos jóvenes, incluso madres cuya razón existencial radica en sostener el crecimiento de sus hijos, han aprendido el valor de construir espacios seguros, aprovechando el entramado de organizaciones voluntarias y comunidades que se dedican a la cura en colectivo”.
Museo de Conchas de la UDR
En la UDR, el recorrido por el Museo de Conchas lo guio Patty Hunter, su coordinadora de Vinculación con la Sociedad. En la entrada, un texto de sala da cuenta de su origen: Nuestro expresidente, difunto, Dr. Gustavo Noboa, hizo una colección durante más de 50 años de conchas marinas, no solo de Ecuador, pero especialmente de Ecuador y de otras partes del mundo. Esta colección de alrededor de 3.400 en conchas o moluscos fue entregada a la Universidad del Río en comodato por Industria Pesquera Santa Priscila, que adquirió la colección y para la cual se diseñó y construyó el museo.

En el museo, ubicado en el mismo campus de la UDR, se exponen alrededor de 420 conchas, dijo Hunter, indicando el interés de que se difunda el conocimiento sobre especies de conchas marinas, tanto en la comunidad como en el mundo. Reveló que se realiza un proyecto de difusión para propiciar el aprendizaje sobre las especies y se busca incluir al museo en el circuito de museos de Guayaquil. “Hemos realizado invitaciones a todos los colegios de Guayaquil, muy pocos han venido por la inseguridad, por la falda de transporte, etcétera, pero no nos cansamos”.
Hunter preció que, hasta la fecha y tras casi un año de su apertura, el Museo de Conchas ha registrado más de 600 visitas y que al lugar han llegado especialistas, biólogos y coleccionistas, siendo estos últimos los que mejores historias comparten con respecto a las especies expuestas. “Cuentan anécdotas y hablan de experiencias, mientras que con el biólogo su saber es científico. Visitar un museo es aprender de la historia”, expresó.



Texto: Carmen Cortez/Dircom. Fotos: Rocío Martínez/Dircom.







