“El cuerpo en página: experimentos editoriales para habitar Guayaquil”

“El cuerpo en página: experimentos editoriales para habitar Guayaquil”. La instalación se inauguró este lunes 14 de julio, en el marco de Inter[•]actos, los encuentros públicos de artes que en esta, su V edición, aborda como temática “Habitares, espacios donde se desarrolla la vida”. Permanece abierta en el Project Room, ubicado en el primer piso del MZ14 Centro de Producción e Innovación UArtes.

Organizada por las docentes Ana Camila Corral y María Mercedes Salgado, de la Escuela de Literatura, la propuesta –se lee en el texto de sala–, es una exposición de experimentos editoriales “que se desdoblan para inspeccionar cada rincón del cuerpo-territorio y calcarlo en formatos que rompen con el soporte tradicional del libro. Estas creaciones indagan el desborde de una ciudad suspendida a cuatro metros sobre el nivel del mar, amoldándose a ella con narrativas desde lo colectivo, los vínculos afectivos y las prácticas de cuidado”.

De la autoría de la estudiante Cesia Morán, el texto impreso en letras de gran formato da cuenta también de que “poner el cuerpo en página permite sentar a Guayaquil para regularle el aliento” y que las obras recopiladas “se encargan de atrapar sus exhalaciones, a manos abiertas, y devolvérselas con cuidado”.

En medio de tanta creación, el texto en referencia es una invitación a recorrer pausadamente los catorce segmentos –o secciones, en términos editoriales– de la instalación, donde los estudiantes, mayoritariamente en grupo, expresan sus sentires sobre Guayaquil, dejando en libertad reflexiones y propiciando una interacción que no es solo lectora.

Así, por ejemplo, en una pequeña mesa se encuentran posits que se pueden utilizar para responder a la pregunta: si hicieras un libro sobre la experiencia de existir en Guayaquil, ¿qué forma tendría? La inquietud está inserta en la reflexión: si Guayaquil tuviera cuerpo, ¿cómo se vería?; si se le moldease una cabeza, ¿cuánto pesaría? Las respuestas dependen de las indagaciones que cada unx haga con los materiales y la voz de esta ciudad.

Otros resultados en torno a la edición marcan el recorrido, como los tres ejemplares de libros artesanales bajo el título: “Hay cadáveres textuales”, del cual se explica: Es el resultado de un proceso de investigación y creación que explora las relaciones entre la escritura, la muerte y la autoría; un libro-objeto que combina una dimensión teórica y poética con juegos de creación textual. Su diseño es artesanal e incorpora elementos visuales y tipográficos que evocan la violencia en Guayaquil y suscitan una reflexión sobre cómo esta se manifiesta en la producción artística. Proyecto de titulación en Literatura de María Isabel Pérez (2024).

Las cinco ediciones, de 18 ejemplares cada una, de otro libro objeto artesanal recibe a los visitantes con la temática “Guayaquil de mis quereres” y bajo la autoría de Gabriel Almeida, Dayana García y Micaela Chávez (2023). “Es una antología narrativa, hilada bajo la premisa de explorar íntimamente las experiencias y miradas de quienes habitan esta ciudad vibrante y caótica. Proyecto colectivo realizado en la asignatura Introducción a la actividad editorial, coordinado por las docentes Camila Corral y María Mercedes Salgado.

Teniendo como firmantes a Geovanna Goyes, Luisa Castellano y Mell Hungría, y en la Ilustración a Mayerli Castro (2024), “Nuevas voces, viejas historias” se presenta como un trabajo conjunto que responde a la necesidad urgente de hacer que la lectura sea un derecho y no un privilegio. El proyecto, una publicación tipo folleto, propone adaptaciones infantiles de diez clásicos de la literatura universal y ecuatoriana, pensadas para conectar a las infancias de Guayaquil con obras fundamentales del patrimonio cultural. Se realizó en la asignatura Historia de la lectura y las plataformas del libro, dictada por la docente Jéssica Zambrano.

Valeria Navarro, Ana Paula Coronel y Kiersten Jungbluth (2022) son creadorxs de “Guayakill Mágico” y en la descripción de un fanzine desplegable del que se hicieron tres ediciones se lee: Retratos SURrealistas de la sociedad guayaquileña es un artefacto textual colectivo en formato de fanzine casero. Este proyecto literario propone una intervención en el imaginario de la ciudad y una lectura crítica del presente guayaquileño desde los márgenes: género, clase y disidencia queer. La publicación surgió de la asignatura Introducción a la actividad editorial y fue coordinado por las docentes Camila Corral y María Mercedes Salgado.

Como “El cofre mini libritos” titularon Marisol Duchi y Julissa Díaz a una obra artesanal que construyeron con relatos e Ilustraciones elaborados por niños, niñas y adolescentes de Guayaquil, a partir de sus experiencias viviendo en la ciudad. Realizado con materiales reciclados, la publicación surgió de la asignatura Introducción a la actividad editorial y fue coordinada por las docentes Camila Corral y María Mercedes Salgado.

“Guayaquil, ya para qué” es un proyecto que recrea un buzón de correo, servicio extinto en el país, para mostrar una fotografía de la ciudad en medio de los apagones. Una propuesta en la que Andrea Carabajo, Heidi Coello, Arelys Hernández, Krystel Hidalgo, Jockasta Montenegro, Xavier Montiel, Melany Muñoz, Marco Antonio Osorio, Yulia Pérez, Kevin Reinoso, Piero Rendón, Samuel Rivadeneira, Génesis Rojas, Maylen Valdiviezo, Juan Martín Vargas y Sandra Vilela (2024) ficcionan la correspondencia como vehículo de historias, memorias, gritos y afectos durante los apagones de 14 horas. La publicación colectiva se realizó en la asignatura Introducción a la actividad editorial, coordinado por la docente Camila Corral.

Rafaela Tapla, Sofía Arias, Paula Páez, Deymilin Véliz y Agustina Macías (2024) llegaron a la instalación con “Niños y mariposas negras”, un proyecto editorial artesanal que nació de la memoria colectiva y los recuerdos de sus participantes. Es una colección de cuentos de terror conformada por tres volúmenes, cada uno con una temática distinta, centrada en describir elementos importantes de Guayaquil: el agua, la naturaleza y la oscuridad. Esta publicación de libros cartoneros, con caja contenedora hecha a mano, surgió de la asignatura Introducción a la actividad editorial, coordinada por las docentes Camila Corral y María Mercedes Salgado.

“Testigos silenciosos de Guayaquil” es el proyecto colectivo, editorial cartonero y comunitario de María Fernanda Fajardo, Robinson Espinoza, Briggitte Ponce y José González (2024), quienes ensayan nuevas formas de escritura testimonial desde el dolor urbano. La ciudad se vuelve escenario y personaje: los perros callejeros, la Entrada de la 8, el barrio Cristo del Consuelo, los hoteles baratos, los buses, la calle 38. Se realizó en la asignatura Introducción a la actividad editorial, coordinado por las docentes Camila Corral y María Mercedes Salgado. Una publicación de La Ruta, editorial en movimiento.

Los estudiantes Fajardo, Espinoza, Ponce y González conformaron la editorial en mención, de la cual en la instalación se presenta también “Narrativas de la calle”, textos creados por Ruth Auqui, Ángela María Canga, Bryan Cabeza y Niurka Cevallos (2024). La Ruta es una editorial cartonera e itinerante que recoge y transforma las historias orales de los barrios populares de Guayaquil, especialmente del Cristo del Consuelo, en libros accesibles y vivenciales. Combinando cartón reciclado, ilustraciones originales y tecnología mediante códigos QR, las publicaciones permiten escuchar las voces reales de sus protagonistas.

Editado por la docente Alejandra Zambrano, directora de la Escuela de Literatura; diseñado por María Mercedes Salgado; y realizado por Atelier UIO (2024), en la muestra se encuentra “Son, sazón y arrullos: cocina afroecuatoriana”, libro que recoge tradiciones culinarias y da testimonio de las prácticas y estéticas de reexistencia de la cultura afroecuatoriana que se entreteje con los hilos de la comida, las memorias compartidas y las narrativas personales. En la publicación, que es parte de un proyecto de investigación, participan Anahí Calza, Mélida Cruz, Nicolás Goussas, Helen Iturralde, Yullana Ortiz, Luis Ponce, Nicolás Schvarzberg, Bradley Hilgert y Carlos Valencia.

“Transfotografía”, de Jordy Tapia (2024) es una posible experiencia multimodal que surge a partir del visionado de un grupo de fotografías de Chantal Regnault. En ellas se captura con la lente a maricas que reconocen la presencia de la cámara, pero se niegan radicalmente a mirarla. Esta publicación surgió en la asignatura Laboratorio Escénico de la maestría de Artes Escénicas de la Universidad de las Artes.

El recorrido por la muestra lleva también a los espectadores hasta una pared donde, bajo el título de “Habitares, espacios donde interactúa la vida”, se aprecian las portadas de publicaciones desarrolladas en Optativa, del itinerario de Edición y Creación que dicta María Mercedes Salgado. Sus títulos y autores: “Resituarse este también es mi lugar”, de Anthony Andrade; “Memorias descriptivas”, de Omaira Martínez; “Memo habitares”, de Leandro Cassanello; “Vacío”, de Javier Ayala; “Bilis, por qué deshabitar el estómago”, de Ana Coronel; “Para mentes abiertas”, de Milena Plúas; “Antrópolis, analogía entre hormigas y personas”, de Darashea Toala; “Paso líquido, el agua siempre encuentra su cauce”, de Eleinn Rivera; y “Sueño, luego existo”, de Génesis Coll.

“Aswa: fermentación creativa” muestra las ediciones del proyecto editorial homónimo que nació en la clase de la docente María Mercedes Salgado y fue concebido como un periódico cultural. La poesía y la narrativa son claves en el producto, en cuya dirección general está Ariana Jordán y en la coordinación del fascículo Poesía, Leandro Cassanello. Intervienen en el número expuesto: Laura Casanella, Emily García, Valeria Navarro, Angeline Jiménez, Keiko Sandoval, Samira Casanella. Paula Auza, Xavier Ayala, Kiersten Jungbluth, Alejandra Villacís, Angie Mero. La imagen de portada es de Alexis Vega; fotografía, de César Sarango; e ilustración, de Chicle Chicle.

María Mercedes Salgado y su reflexión sobre el rol del papel

En la inauguración de “El cuerpo en página: experimentos editoriales para habitar Guayaquil”, que copó el Project Room, Ana Camila Corral y María Mercedes Salgado expresaron con emotiva satisfacción los resultados obtenidos por los estudiantes en cada uno de los procesos.

María Mercedes Salgado hizo una interesante reflexión en torno al rol del papel en los tiempos que corren: “Es entregar espacios de silencio, concentrar nuestra atención y apartarnos del continuo fluido sin fin al que estamos expuestos. La hyper-comunicación nos aleja de la posibilidad de bucear en las profundidades, nos mantiene flotando en lo banal, nos distrae del pensamiento pausado que nos lleve a la reflexión, nos obliga a mantener los ojos fijos en una superficie de perímetro muy limitado, que proyecta contra nuestros ojos su agresiva luz en movimientos frenéticos y sin pausa, montañas de información inútil se vierten directamente en nuestras pupilas, paralizando nuestra voluntad, inmovilizándonos. Basura visual que destruye el paisaje silencioso propicio al crecimiento interno, al desarrollo intelectual a través de todos los sentidos, de todo nuestro cuerpo. El papel nos permite tener un diálogo lento entre el objeto y nuestro pensamiento, frente a él somos actores y no víctimas sometidas. El papel del papel es sagrado”.

Texto: Carmen Cortez/Dircom.

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