La distribución cinematográfica sobre películas ecuatorianas es una discusión que se ha centrado en artículos de periódicos o revistas, donde se hace referencia a cómo le fue en la taquilla, a cifras y modelos exitosos, los cuales son usualmente entregados por los propios productores sin contrastarse de otra manera, indica Jahaira Lilibeth Pilligua Holguin, estudiante de la Escuela de Cine, quien abordó el tema en su tesis de grado titulándola: “Distribución cinematográfica en Ecuador: Análisis comparativo de las estrategias de distribución de los largometrajes Siguiente Round (2018) y Sacachún (2018)”.
El suyo fue un proyecto teórico de investigación sobre cine y cultura que le tomó entre siete u ocho meses desarrollar. “Los artículos publicados no son suficientes para generar un diálogo sobre el manejo de la distribución cinematográfica en nuestro país, y más para nosotros que somos cineastas en desarrollo, que necesitamos empaparnos de ideas innovadoras que nos ayuden a impulsar nuestras propias creaciones a futuro”.
Por eso, agrega, en su proyecto procuró indagar en los distintos enfoques que se le da a la distribución y exhibición cinematográfica dentro del documental. Toda la información que obtuvo, revela, fueron de entrevistas, encuestas, ensayos, libros y redes sociales. “Lo bueno de empezar a indagar en este tipo de temas es que la información que obtienes te permite empezar a estructurar medios de distribución para tus propios proyectos. Por ejemplo, cuando indagaba sobre festivales de cine en nuestro país encontré uno donde podía inscribir un proyecto realizado en un Laboratorio de Rodaje de la Escuela de Cine; se inscribió y ganó”.
En cuanto al proceso de sustentación, Jahaira Pilligua anota que se encontraba en la semana de entrega de documentos cuando se adoptó la cuarentena por COVID-19. “Cuando recibí la notificación de que sustentaría de manera virtual empecé a ver tutoriales de cómo usar la plataforma y sus múltiples herramientas, preparar las entradas y salidas de audio, etc., a fin de que el día de la defensa nada fallara”.
Hubo pocas inquietudes de los miembros del jurado, indica, y muchas felicitaciones por el trabajo realizado, añade. “Confieso que para la tesis no hablé de las distribuidoras cinematográficas existentes en el país, aunque al inicio de mi investigación era primordial. No obstante, uno de los directores que entrevisté manifestó que eran ellos y sus productores quienes hacían las veces de distribuidores. El tema se volvió extenso y con una problemática de fondo que podía generar un discurso alejado de mi propuesta. Preferí enfocarme en cómo estos directores y productores impulsaron sus películas”.
Por la cuarentena todos hemos tenido que cambiar planes, expresa Jahaira Pilligua. “Yo tenía dos cortometrajes en desarrollo, ahora en pausa. Actualmente tomó capacitación en línea en diversos temas que sirvan de herramientas para el desarrollo de mi carrera profesional. Definitivamente obtener mi licenciatura no es el fin. Quiero aplicar para una beca y estudiar una maestría en España o Argentina, y seguir haciendo cine”. (En la foto, la estudiante).







