El trabajo de Jefferson Cabrera, hoy licenciado en Literatura, recoge y selecciona en un ejercicio curatorial tres tiempos del trabajo expositivo del artista y docente de Artes Visuales.
“La Casa de la Cultura Ecuatoriana Benjamín Carrión y sus Núcleos continúan dibujando la geografía de la patria en su Galería Nacional Virtual, espacio de los artistas visuales del país”. La voz en off que se escuchaba mientras se veía en pantalla un video institucional dio paso así, la noche del 28 de abril de 2021, a la inauguración de la exposición Global y Glocal… El Ascenso de los Signos Urbanos del artista Joaquín Serrano Macías.
En el acto inaugural, el también docente de la Universidad de las Artes reiteró lo que en una entrevista previa dijo a InfoUArtes sobre su muestra: “Es importante porque recoge un trabajo de investigación de un joven recientemente graduado de la Escuela de Literatura de la UArtes, desarrollada con la visión fresca de la juventud, para ver a distancia estos procesos que de manera inconsciente se da en el creador”.
El graduado en mención es el hoy licenciado Jefferson Cabrera, quien estuvo presente en la inauguración. Su trabajo de investigación recoge y selecciona en un ejercicio curatorial tres tiempos de la obra de Joaquín Serrano: Los símbolos de lo urbano-social que se detienen temporalmente con el arribo de la “Perla del Pacífico” con la serie “Guayaquil Signos Urbanos”.
Laura Ríos, periodista de la CCE, invitó a la audiencia a sumergirse en el color y la técnica de Joaquín Serrano, cuya exposición es la décima de la segunda versión de la Galería Nacional Virtual, misma que se puede ver en www.galerianacionalvirtual.casadelacultura.gob.ec y que en su apertura estuvo en las plataformas digitales de la institución cultural (Facebook, Youtube y Web) y se retransmitió en las radios 100.9 FM y 940 AM.
Al dar por inaugurada la muestra, Camilo Restrepo, presidente de la Casa de la Cultura Ecuatoriana Benjamín Carrión, mencionó al artista y docente UArtes como uno de los más importantes de la provincia y del país, “y qué gran satisfacción que sea un viejo y querido amigo”, dijo resaltando también los términos dados a la muestra. Global y glocal se sustenta en el cambio fundamental que caracteriza a la sociedad globalizada. Antes definíamos al espacio en términos nacional y local, hoy no se relaciona de manera estrecha con el territorio porque lo global ya no tiene límites.
Con su obra creativa, agregó Restrepo, Joaquín Serrano “levanta la vida diaria de su Guayaquil querido, de ese multicolor escenario que puja por mantener el ayer, presentar el ahora y proyectarse al futuro. Su pintura arraiga a la urbe, nos entrega nuevas figuras e interpretaciones, tecnología, música, baile, voces, signos. Todos urbanos. Creo que sin olvidar el pasado nos trae ese movimiento vertiginoso de lo urbano, que nos invita a pensar en lo que somos y dónde queremos vivir”.
Tras agradecer la presencia de varios de los presidentes de los núcleos provinciales de la Casa de la Cultura Ecuatoriana, Restrepo indicó que la muestra es un lujo para la ciudad, el país y el mundo. Entonces luego de proyectarse un video que reseñó parte de la vida y obra de Joaquín Serrano, él tomó la palabra. Agradeció a la audiencia y reconoció al estudiante, hoy licenciado de la UArtes, por darle una visión fresca a sus procesos pictóricos. Que le interesó mucho reflexionar sobre la estética de lo urbano, anotó el connotado artista, quien agregó haberse dado cuenta de que lo primero que aparece dentro de esta visión son signos urbanos muy similares en las diferentes ciudades de América Latina y el mundo.
Fernando Naranjo, en calidad de presidente de la CCE Núcleo del Guayas, indicó que para la institución Global y Glocal… El Ascenso de los Signos Urbanos es un orgullo porque Guayaquil cuenta con un lector. “La forma de leer su legibilidad urbana es diáfana e inquietante, sobre todo útil para el enriquecimiento de la cultura profunda e intensa que merecemos en la ciudad. Sus cuadros, objetos y sujetos conjugan con la vida cotidiana y establecen un reporte veraz de lo que sucede. Es una suerte de crónica grafica en permanente desarrollo, con el ingrediente de esa comprensión del fenómeno urbano”. Que es propia del autor, argumentó, pues ha invertido décadas de su vida para obtener resultados que comuniquen con total originalidad los detalles en su diario crecimiento, avance y retroceso”.
Las palabras de Naranjo fueron coincidentes con las de Serrano, quien calificó a la propuesta como la oportunidad de compartir las lecturas que tiene de la ciudad que lleva debajo de la piel. Signos urbanos es un proceso que ha venido gestando desde la década del 90 cuando ganó un Salón de Octubre. Ya a fines de siglo había la necesidad de tender nuevos tiempos. Y si de sus obras se pregunta el porqué de los pies, indicó que estos son los que uno mira al caminar por la calle, son el movimiento de la cuidad. Y ahora, en tiempos de virus y pandemia, hay una sorprendente lectura de lo social que nos acerca a lo urbano.
Para Jefferson Cabrera, las imágenes de Joaquín Serrano en sus obras conjugan elementos en tres temporalidades y recorren eso, los símbolos de lo urbano-social, símbolos que denotan el diario enfrentamiento con cualquier circunstancia de expresión social a la vuelta de la esquina de lo cotidiano, de la estrecha relación del autor con su obra y de esa con la sociedad, a la vez que se cumple el ciclo dialéctico de la comunicación.
Que cuando comenzó el recorrido para entender e interpretar los signos que se representaban y codificaban en la obra de Joaquín Serrano vivió una etapa compleja, anotó Cabrera. “No se trata de un artista al que puedo ver en una galería o en su taller. Había que recorrerlo. Salinas, Guayaquil, Loja, Cuenca, ir a lo largo del país”. Su investigación, agregó, tuvo inicio hace cinco años al explorar las primeras frases de los primeros textos de autores que reflexionaban sobre la obra de Serrano y señaló a Hernán Rodríguez y Raúl Vallejo.
La magister Patricia Noriega, directora de los Museos de la CCE, también profundizó en las líneas y colores de la muestra de Joaquín Serrano. “(…) Dentro de su obra se fusionan e interrelacionan de manera inseparable, para conformar el paisaje urbano, elementos concretos naturales o creados por el ser humano y que hacen que la ciudad sea única e irrepetible”, dijo y lo reiteró como una especie de cronista de la ciudad porteña que permite desde la sicología urbana y el arte se conozcan lugares bellos, pero también propone una lectura atravesada por la problemática y el comportamiento de los habitantes de la urbe.