Dos paneles de discusión tuvo el I Encuentro Iberoamericano para la Evaluación de la Calidad de la Educación Superior en Artes. El primero se desarrolló en la también primera jornada con el tema: “La evaluación y el aseguramiento de la calidad de la educación superior en artes, una perspectiva latinoamericana”. Participaron como panelistas Damián del Valle, de la Universidad Nacional de Argentina (UNA); Miguel Flores Covarrubias, de la Universidad Veracruzana, de México; y de la Universidad de las Artes del Ecuador, su vicerrectora académica, María Paulina Soto, y su secretario académico, William Herrera.
Los ponentes dieron a conocer las experiencias de sus universidades en lo que a evaluación de la calidad de la educación superior en artes se refiere. El mexicano, por ejemplo, indicó que en su país si tiene un organismo acreditador de artes, no obstante, se ven en la necesidad de unirse a otros actores para enriquecerse de las artes.
En el segundo panel de discusión se trató sobre “El desarrollo de las universidades en artes y su aporte a la creación, producción artística, innovación educativa y pedagógica”. Intervinieron Ramiro Noriega, rector de la UArtes; Sandra Torlucci, rectora de la UNA; y Mariluz León, del Instituto Superior de Arte de Cuba (ISA).
Ramiro Noriega agradeció la presencia de los representantes de los nueve países convocados, así como de los establecimientos públicos y privados de educación superior del Ecuador. Calificó al encuentro como importante e histórico y mencionó a los organismos internacionales que se han sumado, “los cuales nos han acompañado en el diálogo y el debate. La OEI (Organización de Estados Iberoamericanos), la SEGIB (Secretaría General Iberoamericana), UNA e ISA, con quienes tenemos una cercanía grande”.
Se establece un diálogo interesante cuando pensamos en el tipo de sociedades que queremos, indicó y mencionó el aparecimiento de nuevas Instituciones de educación superior, como los de artes. “El sistema de educación superior en el campo artístico está evolucionando. Loja y Cuenca, con instituciones que se crean en un contexto de transformación. Nosotros (la Universidad de las Artes) aparecimos en una reforma muy profunda. La universidad per se es un valor y nosotros intentamos una nueva, porque una institución del siglo XXI que no considere el tema ambiental, por ejemplo, es inútil.
Sandra Torlucci empezó su sustentación mencionando una frase de autor: “La palabra significa muchas cosas, la cuestión es saber quién es el amo” y argumentó que la educación artística en todos los niveles tiene que ver con la calidad. “Si definimos las artes con un aspecto de la sociedad es inmensurable. No son ciencias, no somos científicos, somos parte de un proceso de transformación”.
De las experiencias desde la UNA, Sandra Torlucci dijo que esta pasó de instituto a universidad y que la autoevaluación funciona. “Los pares evaluadores tienen que ser y trabajar de y desde la educación artística a nivel superior. Es como si nosotros fuéramos a evaluar a arquitectos, estaríamos vetados. Y la realidad cubana, no es la misma que la ecuatoriana o argentina.
Argentina no tiene docentes con muchos posgrados y se pudo resolver con el vínculo con la sociedad. Ahora se producen no sólo creaciones artísticas, sino sociales”.
Mariluz León, de Cuba, dijo que en su país las transformaciones toman su tiempo. El Instituto Superior de Arte es ahora Universidad de las Artes, pero no han dejado de trabajar en ello. El Manifiesto de Córdoba (firmado en 2018) fue el punto de partida. El ISA era un conservatorio que se insertó en un modelo de universidad. Se han movido contextos cognitivos. Se tiene al arte como la ciencia de transformación, pero no con la razón, sino con la sensibilidad. En Cuba la mayor cantidad de doctores están en la música el mismo número de estudiantes por lo que la enseñanza es casi personalizada, expresó.
Esther Surós Reyes, presidenta del Comité Técnico Evaluador de la Junta de Acreditación Nacional, indicó que hay solo un sistema de acreditación y que la autoevaluación es importante, no para ver debilidades, sino para mejorar y continuar. La reunión de ministros que tendrá lugar en La Habana en el 2020 coincidirá con el Congreso Universidad 2020, reveló.