“Don Goyo”, largometraje ecuatoriano (70 minutos) dirigido por Jorge Flores Velasco, se estrenará el 8 de noviembre próximo en la edición número 38 del Festival de Cine Ibero-Latinoamericano de Trieste, Italia, considerado uno de los más importantes y prestigiosos de Europa.
“Don Goyo” es un thriller montubio inspirado en la novela realista ecuatoriana del célebre escritor guayaquileño Demetrio Aguilera Malta. La adaptación y dirección corrió a cargo de Flores Velasco, docente de la Universidad de las Artes y Ph. D., graduado de la Universidad Sorbona de París.
El largometraje recupera uno de los contenidos esenciales del libro de Aguilera Malta: la defensa del medio ambiente en el Ecuador, en una época en que no era un tema literario ni de interés social. El rodaje incluyó a actores jóvenes y experimentados de distintas ciudades y regiones del país. Contó, además, con el apoyo de expertos en producción cinematográfica y técnicos de primer nivel.
“Don Goyo” se filmó en una hacienda real y en uno de los poquísimos bosques protectores primarios de la cordillera occidental de los Andes del Ecuador: el Bosque Tropical Protector Santa Rosa, ubicado en el recinto Suncamal del cantón Cumandá, al sur de la provincia de Chimborazo. Este extraordinario escenario natural se abrió por primera vez para facilitar la filmación de la película, donde se muestra la gran riqueza de flora y fauna conservadas en estado natural por gestión de sus propietarios.
La explotación laboral, la devastación de la naturaleza y la violencia de la “ley del machete” son expuestos en “Don Goyo” a través de la vida de Cusumbo, una joven campesina montubia que trabaja en una hacienda dedicada al cultivo de caña de azúcar y a la producción de aguardiente. Ella vive fascinada por las leyendas del personaje en cuestión, un negro cimarrón que vive y se mimetiza en el bosque natural, dueño a su vez de poderes sobrenaturales gracias a su pacto con el diablo.
En el elenco se incluyen actores profesionales y un grupo de campesinos lugareños del recinto Suncamal. Este enriquecedor proceso comunitario dio como resultado la creación de un universo atemporal, en el cual se destaca la riqueza de puntos de vista de los participantes sobre la propia trama del filme.
Esta película ecuatoriana surgió de una investigación interdisciplinaria y participativa entre profesores, exalumnos y alumnos de la UArtes. Se filmó en condiciones excepcionalmente difíciles: por la naturaleza de la obra y del guion, se trabajó en locaciones de difícil acceso, para garantizar así la calidad natural del escenario antes mencionado; se hizo, además, en un contexto adverso por la pandemia del COVID-19, que obligó a los productores a extremar medidas de bioseguridad. Estas y otras dificultades no impidieron el rodaje de este largometraje que en pocos días se estrenará en Italia.
Fotos Cortesía. En la primera imagen, Jorge Flores Velasco (centro) dirigiendo la filmación y Dominique Pazmiño (derecha) haciendo la cinematografía del largometraje “Don Goyo” en la Hacienda Santa Rosa, Cumandá, Chimborazo.