Con la respectiva bienvenida a las autoridades de la Universidad de las Artes, rector William Herrera Ríos y vicerrectores Olga López y Bradley Hilgert, y a la directora de la Escuela de Posgrados, Diana Medina, se dio inicio la tarde del sábado 11 de diciembre en la Plaza Pública del MZ14 a la cuarta y última ceremonia de graduación cohorte 2021. Fue la del segundo grupo de maestrantes de Políticas Culturales y Gestión de las Artes y de Fotografía y Sociedad en América Latina, y el primero de Composición Musical y Artes Sonoras.
A la entonación del Himno Nacional le siguió la intervención de Olga López, vicerrectora de Posgrado e Investigación en Artes, quien trajo a la memoria los inicios de la Escuela de Posgrados y de las maestrías que actualmente oferta. También hizo un detallado recuento de las 34 tesis de grado de los maestrantes (su discurso en la nota siguiente).
La presentación de la memoria académica-artística de graduados/as de la Escuela de Posgrados, la lectura de Acta de Graduación y la entrega de diplomas, así como la mención e intervención de la mejor graduada, Marilén Carolina Anciani Balzán, fueron los siguientes puntos de la jornada.
Primera maestría de Composición Musical y Artes Sonoras en el Ecuador
Ya en el pódium, Marilén Anciani Balzán (foto sobre estas líneas) pronunció un discurso coloquial, al inicio, pues tras los saludos respectivos a las autoridades UArtes, a los docentes, padres, familiares e invitados de los graduados, así como el agradecimiento por prestarle atención, pidió a todos reírse. Que sentía satisfacción, mucha adrenalina y también nervios, admitió. No era para menos, se trataba de un día especial y único en cuanto a la maestría de Composición y Artes Sonoras de la UArtes. “Dirán que todas las graduaciones son especiales, pero en este caso lo es más porque somos la primera maestría, promoción, cohorte, graduados en Composición Musical y Artes Sonoras en todo el Ecuador. Este maravilloso proyecto que se ha materializado debe celebrarse con bombos y platillos”, indicó, mencionando luego a todas las maestrías.
A su experiencia como maestrante, Marilén Anciani la calificó como un colosal logro y triunfal esfuerzo para todos los involucrados: estudiantes, docentes y demás personas afines. “Todos los que pusieron su granito de arena para poder hacer realidad este sueño”.
Habló de pandemia y de la lucha que muchos, sin duda, mantuvieron para mantener equilibrio y salud mental. “Pudimos acoplarnos y nutrirnos de tanto conocimiento y talento, resultó intimidante tener compañeros tan capaces, expertos de tan alto nivel y rendimiento, y es apabullante y enriquecedor, al mismo tiempo”.
Que eran un grupo de los más diversos que ha conocido, añadió. “En las tres maestrías y en la de Composición Musical y Artes Sonoras conjugamos, por ejemplo, metaleros, salseros, jazzistas, académico, autóctonos y ni hablar de todas estas capacidades técnicas. Nos apoyamos en diferentes situaciones y nos hicimos más fuertes, elevando estándares y el nivel profesional de las artes en el Ecuador”.
¿Y ahora qué?, se preguntó y respondió: “Sea lo que sea que hagamos a partir de hoy, quiero invitarlos a seguir soñando, no importa que suene trillado que son el motor, motivación dulce, agradable, anhelada… No importa que el sueño cambie en el camino, así es la vida, cambiante, se va transformando, codificando… Hemos entregado lo mejor de estos dos años de nuestras vidas, experiencias ganadas, amigos nuevos. Les invito a movernos día tras día al ritmo de nuestros sueños y espero que nos encontremos en nuestros sueños, sean cuales sean”, concluyó.