Cada jueves, a las 18:00, Radio UArtes fue escenario del pódcast “Puerto de Luna”, donde varios cuentos ecuatorianos y sus personajes cobraron vida en las voces de estudiantes de la Escuela de Literatura, acompañados por la docente Solange Rodríguez. La propuesta, cuya segunda temporada se encuentra en proceso, nació el 3 de julio pasado y tuvo ocho episodios, siendo el último un encuentro testimonial de un elenco que se forjó al calor de las historias que adaptaron libremente con el fin de acercar a los escuchas a relatos de los siglos XX y XXI.
El InfoUArtes tuvo también un encuentro con una parte del staff para conocer de cerca su sentir frente a un proyecto realizado con dedicación y creatividad, haciéndose eco del eslogan de Radio UArtes, el cual no solo se lee, sino que se cristaliza en cada una de sus producciones, pues son “frecuencias de lo sensible”.
El nombre del pódcast, “Puerto de Luna”, rinde homenaje a la obra homónima del escritor Carlos Béjar, que acontece en un lugar fantástico y marítimo donde lo más extraordinario es posible. Así consta en el sitio web de Radio UArtes, donde de la producción están los episodios realizados y quienes tomaron parte del proyecto (https://radio.uartes.edu.ec).
Solange Rodríguez reveló que el pódcast fue una idea conjunta con el también escritor Miguel Antonio Chávez, quien en la Universidad de las Artes fue docente de la Maestría de Escritura Creativa y la contactó para planteársela. Reveló que él admira a H.G. Wells, el autor inglés de la novela de ciencia ficción “La guerra de los mundos” –de la cual se hizo en 1938 una adaptación radial que causó escándalo porque la gente creyó que llegaban los marcianos– y del guion audiovisual; ambos integraron el grupo literario Buceta de Papel.


Esa amistad y cercanía los ha llevado a plantearse proyectos conjuntos. Miguel Chávez se encuentra en Canadá cursando un doctorado y en sus redes sociales lanzó la pregunta: ¿Qué cuentos de la literatura cotidiana quisieran escuchar adaptados a un formato de audio? “Hubo respuestas varias y nos dimos cuenta de la necesidad de un cuento narrativo”. Es en ese marco que surgió realizar “Puerto de Luna”.
Siete cuentos fueron los que Solange junto a sus estudiantes en prácticas adaptaron: “El anillo”, “Los perros de Chernóbil”, “Solo cenizas hallarás”, “Rabia”, “Aeropuerto”, “Dulce de lactancia” y “Rosas Rojas para mi secretaria”. De ellos, “Rabia” fue el que más intervinieron, pues lo protagoniza un hombre y cambiaron la locución poniendo a dos mujeres hablando por radio. A Maite Villacreses, asistente técnica de la radio, se le ocurrió que esta fueran walkie-talkie (dispositivo de comunicación portátil) y poner al final rock.
Unos cuentos son adaptables y en otros han debido ser muy atrevidos al momento de adaptarlos e, incluso, al no tener muchos diálogos, los han debido intervenir, refirió Solange, mencionando entre ellos: “Dulce de lactancia” y “Rosas Rojas para mi secretaria”, a los que en adaptación libre incluyeron o sacaron personajes. “Solo cenizas hallarás” tiene la voz de un dialogante, quien es el narrador porque todo el cuento es un diálogo en primera persona, pero al producirlo le inventaron un personaje y una segunda voz.
“La idea fue de Miguel y la fuimos dialogando, hicimos una curaduría de cuentos”, dijo la escritora y docente titular UArtes, indicando que unos estudiantes conformaron el elenco de voces y otros, el equipo de adaptación. En ese punto, vale mencionar que en el primero intervinieron Manuel Flor, Camila Valdiviezo, Cesia Morán, Rebeca Toala, José Alejandro González, Juan Martín Vargas y Joel Álvarez; en el segundo, Manuel, Joel, Cesia, Rebeca y José.
“Trabajamos en cuentos ecuatorianos porque creemos que necesitan de difusión para posicionarse. La intención del pódcast es que los oyentes los vivan y crean. Leer es el primer ejercicio para acercarlos a la literatura nacional desde un formato más moderno. Que (leer) no sea un ejercicio automático, sino que se adentren en las profundidades de los personajes, los cuales son complejos, muchos sufridos y duros, de una generación distinta.

Debido a que los estudiantes que integraron el elenco están de paso, pues intervinieron como parte de sus prácticas, la docente está pensando en hacer un banco de voces y realizar una especie de casting. La nueva temporada de “Puerto de Luna” se concretaría el próximo año.
“Presente en mi viaje personal de crecimiento”
De su participación, Joel Álvarez, quien entra al sexto semestre de Literatura, reveló que como había tenido la oportunidad de participar en concursos de oratoria cuando supo de la convocatoria para “Puerto de Luna” respondió “y ha estado presente en mi viaje personal de crecimiento y maduración”.
Describió al pódcast como un barco que ha atravesado varios desafíos, no solo los externos como la inseguridad, sino también los temas de horarios y gestión. “Camila (Valdiviezo) tiene superclara la producción y hay algo muy bello que rescatar y es que todos hicimos un gran esfuerzo para estar presentes”, precisó Álvarez.
Resaltó el trabajo desempeñado por Rodríguez, Chávez desde Canadá, Villacreses y todo el elenco. Reconoció que, junto con el gusto, había que tener ciertas cualidades para la narrativa, hacer voces y encarnar al personaje. Hubo mucha libertad para experimentar. No tenían un manual de cómo adaptar un libro de literatura ecuatoriana a un guion radial, pero fue una oportunidad porque pudieron descubrir sus voces narrativas.
Junto con los compañeros participó en la adaptación de varios de los cuentos en un ejercicio de yo adapto y tú editas. Al final, esas versiones editadas y reeditadas las aprobaba Solange. “Una sobrescritura y un ejercicio comunitario para poder conversar. Yo tenía mil ideas y me ella me explicaba por qué algunas no eran realizables. Me daba esa pausa”.
“Rabia” y “Solo cenizas hallarás” fueron sus mejores interpretaciones. Solange Rodríguez reveló que se encontraba en Cuenca cuando escuchó el pódcast y lloró. “Joel entendió muy bien quién era él en ese personaje: vulnerable, emocionado, conmovido”. En general, todos, sin ser actores colocaron una parte de su alma al momento de ser quiénes son, refirió.

En la producción y el elenco de voces
De “Puerto de Luna”, además de su experiencia al integrar el elenco de voces, Camila Valdiviezo habló de su rol de productora, el cual le dio capacidad de decisión en cuanto al material del pódcast y el trabajo a realizar. Opinó que el espacio fluyó bastante bien y que Solange llevó el liderazgo absoluto, dándoles oportunidad para desarrollarse casi profesionalmente en este entorno académico.
Entre sus tareas, Camila aunó al grupo, asegurando que todos estuvieran listos y predispuestos para las grabaciones y sus posteriores difusiones. Consideró que, aunque la primera temporada ya concluyó y se preparan para la segunda, su trabajo empezará cuando todos los programas estén colgados en las redes, sobre todo en Spotify.
Como productora reveló tener en mente algunas estrategias de difusión, las cuales deben ser creativas e innovadoras y responder a los tiempos actuales y a nuevos grupos. Citó entre estos a los adolescentes y adultos mayores, quienes, seguramente, encontrarán en los cuentos historias que han escuchado antes o voces; el formato les recordará a las radionovelas.
De la experiencia de haber laborado durante 10 años en un asilo, Camila comentó que durante la pandemia transmitieron un programa de radio que amigos suyos grabaron en sus casas con diferente contenido; lo hicieron en un sistema de radio parlantes. Puede ser ese un punto de difusión, así como los territorios y colegios, las radios comunitarias y los proyectos de vinculación con la sociedad ya existentes.
Una asistencia técnica fundamental
Maite Villacreses abonó que supo de “Puerto de Luna” desde que se lanzó la convocatoria para la participación de los estudiantes. Leyó su descripción y llevó el tema al comité editorial del medio universitario, integrado por la vicerrectora académica, Olga López, y las docentes Ybelice Briceño, María Paulina Briones, Amaranta Pico y Libia Pérez.
“Vimos que era una propuesta que nos interesaba exponer, realizar y tener. Ellos vinieron muy entusiasmados con la introducción hecha y algunos audios que querían que estuvieran en la propuesta. Los escuchamos, nos encantó y los pusimos desde el inicio, con el audio de Miguel Chávez desde Canadá”, explicó Villacreses, quien trabajó en las sonorizaciones e identidades sonoras del pódcast. “Es difícil imaginarse cómo va a ser el producto final, pero después de editar se los envié para que corrigieran y si era necesario, volver a editar”.
Añadió haber escuchado todos los programas por trabajo y placer. En lo primero porque debió editarlo sola y/o con los pasantes. “Me gustaron mucho ‘Los perros de Chernóbil’, ‘Solo cenizas hallarás’ y ‘Rosas Rojas para mi secretaria’, el cual me enamoró”.
El guion le señaló las varias ambientaciones y sonorizaciones que los adaptadores necesitaban para los episodios, por lo cual debió recopilar todos los sonidos. “Hubo nervios en la locución del primer episodio y del tercero o cuarto, porque vinieron con problemas dentro del guion, les sugerí ensayar, hacer escuchas entre ellos y llegar listos para entrar en el personaje. Desde el inicio hasta el final evidenciaron cambios al darles vida a sus personajes en cada escena. Todo se fue afinando. Al final tuvimos muy buenos episodios”.
Texto: Carmen Cortez/Dircom.







