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Estudiar en la Universidad de las Artes dio a Laura Guamán Sinchi, graduada de la UNAE, una segunda profesión

Con la colaboración de sus compañeros, Laura Guamán Sinchi realizó en la Universidad Nacional de Educación (UNAE) un mural al que tituló “Runas”. También gestionó la donación de la obra de un reconocido artista cuencano y junto con la dirección y docentes de la carrera de Pedagogía de las Artes y Humanidades (PAH) organizó la primera exposición pictórica en la institución donde, el pasado 16 de febrero, recibió en una emotiva y solemne ceremonia de graduación su licenciatura.

Guamán Sinchi dio cuenta así, con las actividades realizadas, la inclinación que siempre tuvo por el arte, del cual pudo aprender y desarrollar más cuando cursó junto a 15 compañeros parte de la carrera en la Universidad de las Artes, por el convenio que nuestra institución de educación superior mantiene con la UNAE.

La hoy licenciada Laura Guamán Sinchi junto a la doctora Patricia Pauta, directora de la carrera Pedagogía de las Artes y Humanidades en la UNAE. El coordinador de la carrea en la UArtes es el doctor Byron Cevallos.

A la experiencia de estudiar en la UArtes la señaló como enriquecedora, revelando que desde el primer día hasta el último sintieron el cariño e interés de las autoridades y docentes. Fue un gran reto movilizarse a Guayaquil y establecer en una ciudad a la que unos escasamente conocían y otros no, pero el entorno artístico en el que vivieron y desenvolvieron les permitió activar los sentidos y estar en armonía con los distintos lenguajes artísticos que se imparten en la Universidad de las Artes, refiere la hoy licenciada.

“Recorrer sus instalaciones y respirar arte fue la mejor manera de aprender; socializar y entablar amistades con estudiantes que están dedicando su vida al arte también fue una forma de aprendizaje, así como aprender de grandes docentes artistas”, expresa.

Que había venido pocas veces a Guayaquil, la cual está llena de oportunidades, añade. En lo personal, Guamán Sanchi no tuvo dificultades para habitarla y recorrerla, pues en Cuenca ya era independiente. Varios de sus compañeros, en cambio, debieron luchar para adaptarse al nuevo estilo de vida porque era la primera vez que se alejaban de sus padres y hermanos; otros debieron dejar a sus hijos con familiares. “Para todos, el factor económico fue complicado, pero gracias al excelente apoyo de las becas UArtes pudimos solventar los gastos del costo de vida”.

Debido a la emergencia sanitaria por la COVID-19, esta primera cohorte de graduados estudió solo un ciclo en Guayaquil, indica Guamán Sanchi, quien lamenta no haber podido estar más tiempo para sus prácticas preprofesionales, inclusive. “Me quedé con una gran impresión al conocer la Escuela Hilarte, que nos recibió con los brazos abiertos y cuya metodología era en su totalidad artística. Música, danza, teatro y pintura estuvieron presentes en cada actividad impartida con la niñez. Impresionante fue la gestión de los directivos, quienes impulsaron exposiciones de los trabajos realizados en lugares tan importantes como el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC)”.

De estas PPP, Guamán realizó un gran mural en la sede de Hilarte, en la Isla Trinitaria, con la participación de un artista plástico y el apoyo de sus compañeros. “Desde el inicio de mi carrera en la UNAE tuve el gran deseo de plasmar varias situaciones sociales en las paredes a través del muralismo, por ello también gestioné un mural para el colegio Leonidas García de Guayaquil, el cual dirigí y tuvo el apoyo de instituciones externas”. 

Igualmente, revela, gestionó en la comunidad y puerto de Engabao la realización de talleres de dibujo, pintura, guitarra, paisajes sonoros y musicogramas, en los que también intervino una compañera y un artista plástico. “La experiencia fue maravillosa. Conocer y vincularnos con los habitantes de la comunidad, sentir su interés y apoyo a los proyectos artísticos nos dejó un gran aprendizaje. Allí realizamos dos grandes murales del cacique Tumbalá y los pescadores”.

Por ser parte de la primera promoción de la carrera de PAH de la UNAE y la UArtes, Guamán Sanchi expresa sentirse privilegiada. “Gané muchas experiencias y recibí el conocimiento de maravillosos maestros. Tuve la oportunidad de conseguir una segunda profesión de dos universidades emblemáticas públicas del país. Profesión a la que dedicaré mi vida, pues el arte en sus distintos lenguajes me ha apasionado siempre y ahora tengo el enfoque y la metodología para llevarlo a la enseñanza y entregar a la niñez y juventud los conocimientos y beneficios que solo el arte nos puede brindar”.  

Texto: Carmen Cortez Fotos: Cortesía Laura Guamán Sinchi

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