Economía naranja, industrias creativas, creación de empresas, innovación, competitividad… Estos y otros conceptos fueron abordados en la mesa de diálogo “La creatividad como herramienta de políticas para el bienestar: ¿una posibilidad para la región?” del 3er Encuentro de Políticas y Economía de la Cultura, organizado por el Observatorio de la UArtes. Sucedió este viernes 23 de junio, al cierre de una jornada de tres días, iniciada el miércoles 21.
Con Sabrina Ibarra, gerente de la Empresa Pública de la Universidad de las Artes (UArtes EP), como moderadora, en la cita participaron Xiomara Suescún, directora del Observatorio de Economía Creativa y Cultural de la Alcaldía de Cali; Alejandro Cedeño, gerente general de la Empresa Pública Municipal de Innovación y Competitividad (EPICO); y, Marcos Vega, director ejecutivo de Prendho Incubadora de Negocios de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL).
Suescún no había estado antes en Ecuador y que la reciba la UArtes, dijo, reafirma el espíritu de trabajar por el sector cultural. “Es un proyecto impresionante, en Cali tenemos el Instituto Popular de Cultura (IPC) que está migrando a ser una universidad y le han asignado un edificio patrimonial”, anotó. Su trabajo es en economía creativa y es gestora cultural y considera que en ese rol vienen insistiendo ahora desde lo público.
Si la creatividad la podemos integrar en las políticas, qué significa y cuál es el alcance, se cuestionó, respondiéndose que en Colombia el tema de la economía naranja y de las industrias creativas y culturales se ha abordado desde el Ministerio y Secretaría de Cultura del país. Añadió haber llegado a la Alcaldía de Cali porque había el vacío de que, siendo una ciudad cultural y artística, habiéndole aportado al país –como pionera– en el cine, el arte moderno, el teatro… y teniendo historia tan significativa, no tenían industrias culturales y un abordaje desde allí.

“Llegamos a la Secretaría de Desarrollo Económico, donde está esta estrategia, a pensar y darle también un lugar a la cultura y a las industrias creativas desde lo público y en otro espacio que no solo sea la Secretaría de Cultura”. El arribo se dio en un momento crucial de la ciudad, pues se estaba creando por primera vez una política de desarrollo y podían incluir el componente cultural y de industrias creativas como uno de los cuatro ejes estratégicos de esta. Fue clave, pues políticamente funcionó que pasara lo de la economía naranja.
Próxima a cumplir cinco años de gestión y haciendo un balance, Suescún indicó que han creado políticas públicas para el sector cultural desde desarrollo económico, con economía creativa que se enlaza con economía circular y economía digital. “Venimos construyendo todo un marco institucional. Al ser Cali una ciudad artística, cultural, que inspira y ha dejado generaciones enteras de artistas, que ha influido tanto y sufre tanto nuestro sector cultural por trabajo, oportunidades y ha migrado mucha gente a Bogotá donde se queda el 75% de lo que se genera, el reto era crearle lugares”.
Se postularon como ciudad creativa UNESCO, lo cual trazó otra ruta para cumplir con el ecosistema de la ciudad “y hemos tratado a través del concejo municipal y el alcalde dejar decretos y acuerdos para proteger algunas de las iniciativas. (…) Todo ese marco institucional es el que nos ha dado el piso y le dará el piso a algunos de los procesos que tenemos. El trabajo con el ecosistema fue fundamental”, dijo Suescún, quien mostró en pantalla muchos de los resultados de lo efectuado, como el MEC (Movimiento de Empresarios Creativos), una plataforma de promoción, exhibición y creación de conexiones de valor para el ecosistema creativo y cultural de Cali y el Pacífico.

En su presentación, Marco Vega definió a Prendho Incubadora de Negocios de la UTPL, de la cual es su director ejecutivo, como una entidad privada comprometida con el desarrollo de un objetivo puntual: crear más empresas, habitualmente muy inclinada al tema de la creación de base tecnológica porque la universidad es un parque científico y tecnológico. Desde 2021 están también comprometidos con el sector de la industria cultural. “Nuestro rector, Santiago Acosta, consideró que era oportuno aprovechar la experiencia de más de 10 años que tenemos con incubación en este sector, ya llevamos tres cohortes”.
¿Se puede vivir del arte y de la cultura?, preguntó Vega y como respuesta desplegó información de la UNESCO, indicando que, en el contexto de la Industria Cultural y Creativa (ICC), esta aporta más el 3% del PIB mundial, genera más de 2,25 billones de dólares anuales, emplea más de 26 millones de plazas de empleo en el mundo, es un recurso renovable, sostenible, sustentable e ilimitado y es inclusiva. Con estas características, dijo, se lanzaron al ruedo de desarrollar empresas en la ICC.
Los retos que han encontrado son: perfil propio de los creativos y artistas, y modelo heurístico versus la estrategia radial, lo cual significa generar una oferta de valor a partir de conectar emociones. “Tenemos retos puntuales, como el desarrollo de prototipos y la comercialización, que es totalmente diferente al producto que se pone en una percha. Hay un mar de diferencia”.

El modelo de incubación de Prendho se inicia con un diagnóstico a nivel nacional para identificar áreas importantes. “Hay 22 manifestaciones del arte y la cultura, según la UNESCO, nosotros nos enfocamos en: música, artes escénicas, videos y audios, educación no formal del arte y patrimonio cultural. A partir de allí desarrollamos las etapas de preincubación, incubación y lanzamiento”, anotó Vega y reveló haber generado alianzas estratégicas con actores experimentados.
Han hecho convocatorias a nivel nacional. En 2021 tuvieron 67 postulantes, en 2022 fueron 90 y en 2023 suman 145. “Tenemos 24 empresas graduadas que ahora son parte de la comunidad de Prendho y 25 que se están incubando”. Como lecciones aprendidas mencionó incentivar la creación de empresas de ICC a través de apoyo a incubadoras con programas establecidos y validados y apoyo a empresas que inviertan recursos; establecer fondos de capital semilla reembolsables en su mayor parte para empresas ICC; y, la creación de incentivos de empresas ICC para etapas tempranas de desempeño.
Alejandro Cedeño, gerente general de EPICO, hizo referencia a los ponentes que le antecedieron, indicando que con la experiencia compartida por Xiomara Suescún quedó claro el por qué y con Marco Vega la metodología, que es el cómo. Él se iba a referir a cuándo. Expresó que una de las gerentes líderes, Maite Freire, le hizo reflexionar al inicio de la gestión respecto a la ciudad regenerada y la habitada, donde convergen culturas, están los ciudadanos y turistas nacionales y extranjeros. No se puede hablar de innovación sin hablar de creación.

“Innovación para la creación es la base de la competitividad, es como lo entendemos para armar la hoja de ruta. No podemos pensar en un Guayaquil más competitivo si primero no hemos creado. La creatividad es parte del desarrollo económico de ciudades, países y regiones; es la base del proceso. Parecería que la cultura nos lleva al tema creativo, cuando es parte de la economía. Estamos llamados a pensar cómo transformamos industrias, negocios, cultura, políticas”.
La nueva administración ha generado como compromiso poner al ciudadano creativo e innovador en el centro, que sea parte de este proceso de cambio, que el arte y la cultura se permita ver como una oportunidad de desarrollo económico, que se entienda la innovación y la creatividad como el eje de un Guayaquil más competitivo y actuar de manera transversal e interinstitucionalmente, con objetivos comunes y ciudadanos. Una cohesión del sector privado y la sociedad civil, pero también de la academia y de los organismos multilaterales que viabilice a través de políticas públicas programas y proyectos de desarrollo que necesitamos como país.
Cedeño invitó a aplicar la creatividad y ser agentes de cambio, agentes económicos. “En índices de innovación y e industrias creativas estamos como ciudad y país muy por debajo de la región”.
Luego de las exposiciones, Sabrina Ibarra inició una ronda de preguntas propias y del público, mismas que hicieron referencias a los procesos, a tejer relaciones, a la diversidad de creadores, a los diagnósticos.
Cobertura/Texto: Carmen Cortez