Dos muestras y dos foros programó el Encuentro de Vinculación con la Sociedad para su VI edición, así los docentes que están al frente de los proyectos que son trabajados en territorio y en comunidad pudieran dar cuenta de lo desarrollado junto a sus estudiantes. Las proyecciones de los registros audiovisuales tuvieron lugar en la Sala de Cine del MZ14 Centro de Producción e Innovación de la Universidad de las Artes.
En la cita se desarrollaron, además, la Feria de Prácticas Preprofesionales y el Encuentro de Graduados; en su primera jornada, el jueves 23 de octubre de 2025, se presentaron los audiovisuales de los proyectos “Escena Corpolúdica”, “Casas Comunitarias de las Artes” y “Guayas Pueblo de Colores II Fase”. Seguidamente, los docentes que participaron en sus respectivas ejecuciones intervinieron en el foro. Lo hicieron, en el orden antes mencionado de la presentación de proyectos: Lorena Toro, Byron Cevallos y María José Icaza.
La segunda muestra de audiovisuales tuvo lugar el viernes 24. Seguida igualmente por el conversatorio, se presentaron los proyectos “Ánima”, expuesto luego por Jorge Tigrero; “Bibliotricimoteca”, por Marcelo Leyton; “Pacha”, por Luis Páez; y “Derivas: Memoria en movimiento”, por Siomara España.
Del proyecto “Escena Corpolúdica”, Lorena Toro indicó que fue una propuesta trabajada en conjunto con el académico y director escénico Diego Ortega, plateándose como objetivo la generación de espacios artísticos interdisciplinarios de exploraciones diversas mediante juegos y materialidades que ayuden al desarrollo de las inteligencias múltiples en niñas y adolescentes de la Casa Hogar Infanto Juvenil Femenino del MIES (Ministerio de Inclusión Económica y Social).

Junto con docentes-directores, en el proyecto intervinieron estudiantes de las escuelas de Artes Escénica, Artes Visuales y Cine, formando un equipo multidisciplinario que indagó en la expresión corporal, escritura e imagen como herramientas de autoconocimiento y fortalecimiento personal. Cada uno de los encuentros mencionados fue reconocer saberes propios a través del manejo corporal, del dibujo, del sonido, de lo visual y la escritura, generando con las niñas de la Casa Hogar espacios de sensibilidad y cuidados para fortalecer su autoestima.
De “Casas Comunitarias de las Artes”, el docente Byron Cevallos, coordinador de la carrera de Educación Artística Intercultural, expuso el proyecto desde su concepción hasta sus procesos y ejecución en territorio. Surgió en 2021 como un proyecto de investigación y, a la vez, de vinculación con la comunidad, dos de las funciones sustantivas de la educación superior –la tercera es docencia–. Se situó en la comuna de Engabao, en la provincia del Guayas. Allí se han desarrollado varios procesos y talleres con una metodología sustentada en el planteamiento de un diagnóstico, su contextualización, acercamiento con la comunidad y problematización, lo cual sirve de análisis con la realidad.
La investigación ha sido clave para desarrollar esta metodología y entender el territorio como un lugar de enunciación crítica de transformaciones, anotó Cevallos, detallando en la puesta en marcha de la propuesta el aprendizaje basado en la creación y el aprendizaje basado en proyectos. Como un objetivo claro del proyecto consta la creación de procesos artísticos y organizativos en territorios diversos, sobre todo donde haya injusticia socioambiental, a fin de recuperar espacios comunales o públicos a través de las artes para el fortalecimiento de los tejidos de interculturalidad y sostenibilidad.

El objetivo anotado no es solo con el proyecto en Engabao, sino también en Azogues y ahora en Guayaquil hacia donde “Casas Comunitarias” se ha extendido; este ejercicio ha permitido ir descubriendo que los lugares son claves y que las prácticas artísticas deben repensarse también en el ambiente dónde se desarrollan y ahí surge la idea del aula expandida como un escenario que va más allá de la reestructuras.
El proyecto “Guayas Pueblo de Colores” se encuentra en su segunda fase, se indicó en el encuentro. La primera se cumplió de manera conjunta con la Prefectura del Guayas, con la cual en junio de 2021 la Universidad de las Artes firmó un convenio de cooperación interinstitucional y para su realización se planteó como objetivo implementar y desarrollar de manera efectiva, en los diferentes cantones de la provincia, programas socio-culturales que fomenten la participación de las comunidades rurales para el desarrollo local equitativo y solidario, en el ejercicio de los derechos culturales, el acceso a las artes y a la expresión artística, la protección y promoción de la diversidad cultural y el respeto a sus espacios de generación e intercambio, la memoria social y la salvaguardia del patrimonio cultural.
En su segunda fase, “Guayas Pueblo de Colores” se comprende como una estrategia de gestión articulada que promueve la formaciónartística con niñas, niños y jóvenes, y el acceso a la producción y circulación de prácticas artísticas y creativas como mecanismos para el desarrollo de las capacidades creativas, el pensamiento crítico y la promoción de la diversidad cultural y la equidad con comunidades de zonas rurales de la provincia.
Las presentaciones del segundo día

“Derivas: Memoria en movimiento” es un proyecto impulsado por Siomara España y Solange Rodríguez, docentes de la Escuela de Literatura, quienes junto a sus estudiantes llegaron a personas en condición de movilidad y en situación de vulnerabilidad con talleres literarios para pensar la escritura y el derecho de narrar topografías ausentes a través de la memoria, la evocación y el diálogo.
Estos talleres fueron abordados de forma sensible y respetuosa para lograr la creación conjunta de historias de vida. Contaron con varias entidades aliadas, que se fueron sumando en el camino de la ejecución del proyecto, cuyos resultados constan en un documental, elaborado con/por los estudiantes con el testimonio coral de quienes no solo viven, sino que enfrentan la movilidad migratoria; y un libro que, asimismo, recoge testimonios de los participantes, de los estudiantes, de las mismas gestoras de la propuesta.
De “Ánima, laboratorio artístico para la transformación en sectores vulnerables”, su director, Jorge Tigrero explicó desde la concepción de su nombre, mencionando que su significado es alma y fue concebido como un espacio para aplicar estrategias pedagógicas en artes, a través de talleres transdisciplinares, con temáticas afines al desarrollo integral de los estudiantes, para el fortalecimiento de capacidades en comunidades guayaquileñas en situación de vulnerabilidad social.

Junto con los talleres, que permanentemente han dictado los estudiantes en la Sala Ría de la Biblioteca de las Artes, el proyecto impulsó la conformación del coro de nombre homónimo, integrado por personas de la tercera edad, así como la alianza establecida con el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), permitiendo a los alumnos recibir capacitación para la implementación de propuestas que impulsan la divulgación de los derechos ciudadanos.
Jorge Tigrero señaló con mucha satisfacción la edición de tres volúmenes del libro “Recursos artísticos y didácticos”, el cual recoge algunas de las metodologías impartidas en los talleres que estudiantes de la carrera de Pedagogía de las Artes y Humanidades, que la UArtes compartía con la Universidad Nacional de Educación (UNAE), dictaron en la Sala Ría y otros espacios de la universidad.
En la exposición de “Pacha”, Luis Páez, director del proyecto, contó con el acompañamiento de Luis Caicedo, integrante de la Fundación Afrodescendiente Karibu con la cual se ha trabajado en territorio y la UArtes mantiene un convenio de cooperación. Anotó varias de las acciones desarrolladas, como la creación de una biblioteca comunitaria, denominada Karibuleo, y el desarrollo de talleres, que en tiempos de pandemia –a fin de no parar– se realizaron de manera virtual.

Del proyecto “Bibliotricimoteca”, que se encuentra en su cuarta fase, Marcelo Leyton, su director y actualmente a cargo de la Dirección de Vinculación con la Sociedad UArtes, dio cuenta que su nombre fusiona las palabras “biblioteca” y “tricimoteca” para hacer referencia a la biblioteca itinerante y comunitaria que, como el vehículo en mención, se desplaza por diversos territorios.
Su campo de acción ha sido el territorio, en sectores como Monte Sinaí, donde se conformó una agrupación denominada El Gran Teatro de Monte Sinaí, con integrantes que empezaron a corta edad y que ahora, muchos de ellos, ya son jóvenes y se presentan en varios escenarios de la ciudad y del país.
Para trabajar en comunidad hay que hacer comunidad y las artes son la mediación para lograrlo y, al mismo tiempo, ir tejiendo entre una comunidad y otra, es la visión que Leyton dio a su propuesta, cuyos resultados, de los talleres y actividades desarrolladas en territorio, son expuestas en el Festival PazArteAlegría, cuya sexta edición marcará el cierre del encuentro.
En la imagen principal constan los docentes-directores de los proyectos presentados el 23 y 24 de octubre. En el primer día: María José Icaza, Lorena Toro y Byron Cevallos; con ellos. Allisson Laborda y Patrio Sánchez. Segundo día: Marcelo Leyton, Jorge Tigrero, Siomara España y Luis Páez; los acompaña Luis Caicedo, de la Fundación Afrodescendiente Karibu.
Texto: Carmen Cortez/Dircom. Fotos: Paula Alcívar Mosquera, estudiante de la carrera de Cine/UArtes y Joel Álvarez, estudiante de MKT Digital/TECSU.







