Entre agosto y septiembre del presente año se cumplió otra fase del proyecto Escuela de las Artes, de la Universidad de las Artes, liderado por la Jefatura de Prácticas Preprofesionales junto a la Dirección de Formación Continua, la Dirección de Vinculación con la Sociedad y UArtes EP. En ella, se ejecutó una serie de talleres que, en varios espacios culturales de Guayaquil, proporcionaron formación artística de calidad a la ciudadanía.
Estas formaciones fueron: Escultura para adultos mayores, Introducción a los instrumentos musicales y Fanzine Pop-Up, en el Museo Nahim Isaías; Collage sonoro y Composición fotográfica (los miércoles), en el MAAC; Cantares de mi tierra, La memoria puente y Cine foro, en la Biblioteca de las Artes; Movimiento expresivo, Composición fotográfica (los martes) e Instrumentos ancestrales, en el Museo Presley Norton; y, también, Batucada popular, en el MZ14 Centro de Producción e Innovación UArtes.
Uno de los públicos receptores, al que se ha prestado una atención privilegiada, es el compuesto por adultos mayores, quienes encuentran, en esta oferta, espacios para la creatividad y la exploración personal. Ellos no solo exploran su mundo interior, sino que conectan con inquietudes artísticas que quizá llevaban algún tiempo dormidas o que se han manifestado como una novedad entrañable, en un momento vital en que su aporte a la sociedad se tiene por cosa juzgada y pasada. Algunos han manifestado sentirse vivos y útiles al acudir a estas citas con el arte; encuentros que les aportan una distancia saludable de aquellos sentimientos de tristeza y estancamiento que suelen asaltarnos cuando dejamos de trabajar o, por equis motivo, nos vemos recluidos por largas temporadas en casa.
Para ellos, los acercamientos con las canciones que marcaron sus infancia y juventud, con las historias que, a su vez, les contaron sus mayores, que vivieron de primera fuente o que representaban un nudo interno, constituyen tanto el recorrido por un archivo íntimo, como la dación de un legado invaluable para las presentes generaciones. De igual manera, el aprendizaje de nuevas destrezas como la plasticidad de la escultura, la apropiación del ritmo a través de instrumentos musicales o el reencuentro con la magia de la luz en variados y divertidos experimentos fotográficos, quizá les signifique la evidencia de que nunca es tarde para ver el mundo con ojos y curiosidad renovada, para descubrir aspectos especiales que el día a día ha ido alejando de nuestros sentidos.
Pero también, niños y niñas, adolescentes, adultos jóvenes y adultos en general, disfrutaron y se beneficiaron de la oferta formativa de la Escuela de las Artes. Y es que, la concepción de los talleres permitió que varias poblaciones etarias coincidiesen, incentivando el intercambio de vivencias, experiencias y saberes en las distintas rutas de aprendizaje artístico. Algo que, por cierto, se refuerza con la presencia de las y los estudiantes de la Universidad de las Artes que semana a semana, al cumplir con sus horas de prácticas preprofesionales, se apropian de este proyecto para llevar a la praxis los conocimientos recibidos en sus respectivas carreras, así como para aprender lo nuevo y aportar con ideas propias.
Propuestas como Collage sonoro, Fanzine Pop Up y el Cine foro movilizaron a grupos de amigos, familias enteras, parejas y demás, hacia momentos en los cuales la chispa de la creatividad se juntó con la sensibilidad hacia una realidad que nos aborda e interroga de tal manera que miramos hacia un lado, pero que en estos talleres pudo ser vista desde otras aristas, poniendo en evidencia que no la estamos negando, sino que necesitamos otras formas de asumirla y procesarla.
Un taller que concitó una atención especial fue el de Batucada, el cual se facilitó a los miembros del colectivo Batucada Popular. Lo integran jóvenes procedentes de distintas barriadas, quienes han encontrado en los instrumentos de percusión y en los ritmos afro-urbanos una salida artística a los ciclos de violencia y discriminación que la sociedad genera y soporta. La mayoría de ellos llevan ya algún tiempo en esta práctica, movilizados a través de una iniciativa impulsada por la Fundación Minkayni, y encontraron en la Escuela de las Artes herramientas, conocimientos y guía para depurar su arte y afianzar lo que para muchos será su proyecto de vida.
En el evento de cierre del taller Batucada, se apreció varios ejercicios de creación colectiva a través de los cuales se cuestionó a la sociedad, a las autoridades de turno, a las distancias que marcamos con el otro. Todo ello con el afán de reivindicar no solo una lucha social, sino de posicionar una propuesta de igualdad y vida.
Propuesta se afianza
Todas estas experiencias no marcaron un término, al contrario. El proyecto de la Escuela de las Artes no para, más bien, se afianza y promueve más talleres en espacios culturales y acciones en territorio, así como activaciones artísticas puntuales a través de acercamientos interinstitucionales. De ahí que se hayan propiciado encuentros con los beneficiarios de entidades como la Fundación Raíces, el Teatro Centro de Arte, la Unidad Educativa República de Francia y el Hogar San José de la Junta de Beneficencia de Guayaquil. Para el periodo comprendido entre este mes de octubre y noviembre, los habitantes de Guayaquil y sus alrededores podrán acceder a las siguientes propuestas de talleres:
Museo Presley Norton: Sonidos ancestrales, donde los participantes apreciarán y experimentarán con réplicas de instrumentos precolombinos, algunos de ellos capaces de replicar sonidos de la naturaleza. Se impartirá los sábados, de 15:00 a 17:00.
Cantares de mi tierra, una experiencia que combina aquella destreza para el canto que la mayoría tiene escondida con la memoria local y cada tránsito personal matizado por recuerdos, expectativas y anhelos. Los martes, de 14:00 a 16:00.
Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC): Taller de escultura. Dirigido en principio a adultos mayores, esta propuesta busca conectar la imaginación y la creatividad con las manos y el resto de los sentidos. Los miércoles, de 10:00 a 12:00.
Biblioteca de las Artes: Semillero de cuentos, el espacio ideal para que padres, madres y cuidadores refuercen el hábito de la lectura en las y los niños bajo su responsabilidad. Un cuento antes de dormir, o un sábado al mediodía, puede ser la puerta a un porvenir que privilegie la imaginación y la amistad. Los sábados, de 11:00 a 13:00.
Museo Nahim Isaías: Cuerpo y voz, un taller creativo para preadolescentes donde la voz y el cuerpo se convierten en herramientas expresivas y musicales. Los viernes, de 15:00 a 17:00.
Espejos de vida, una propuesta para personas adultas y de la tercera edad que propone la apropiación del cuerpo y de las historias de vida para crear ejercicios de actuación ante la cámara. Los miércoles, de 15:00 a 17:00.
Taller de acuarela, espacio para aprender con calma y paso a paso una de las técnicas más delicadas y, a la vez, más complejas del arte pictórico. Los jueves, de 15:00 a 17:00.
MZ14 Centro de Producción e Innovación UArtes: Écrans de cinéma, la idea es conjuntar el potencial narrativo tanto del cómic como del cine en la elaboración de un libro álbum que cuente una historia en viñetas que replicarán los distintos formatos de proyección que han existido en la historia del cine. Librería Miguel Donoso Pareja (Fondo de Cultura Econámica), los viernes, de 16:00 a 18:00.
Batucada popular, un taller que se afirma para incorporar nuevas voces a su propuesta. Ritmo, búsqueda de sentidos, compromiso y apropiación de proyectos de vida. Los sábados, de 10:00 a 13:00.
Esta fase recién empieza, así que tanto estudiantes como público en general pueden contactarse para acceder a esta propuesta multipropósito.
Texto y fotos: César Galarza/Escuela de las Artes.